El Canciller cubano, Bruno Rodríguez, rechazó este lunes las declaraciones del Secretario de estado norteamericano, Anthony Blinken, sobre los hechos vandálicos acontecidos en la isla el pasado año.
En un mensaje divulgado en la red social Twitter, el ministro de Relaciones Exteriores de la nación caribeña dijo que las declaraciones del jefe de la diplomacia estadounidense confirman el involucramiento del gobierno de ese país en el intento de subvertir el orden y la paz en Cuba.
El Departamento de Estado hizo públicos este lunes unos comentarios de su secretario en el que se refiere a los disturbios del 11 de julio de 2021.
Con anterioridad Rodríguez había expresado en Twitter que el gobierno y el Departamento de Estado buscaban desacreditar el triunfo popular de Cuba ante la agresión imperialista luego del fracaso de provocar una rebelión en el verano de 2021.
En las ultimas jornadas esa instancia gubernamental estadounidense emitió varias comunicaciones que funcionarios cubanos califican de injerencistas, además de que anunció restricciones de visado para más de una veintena de representantes gubernamentales de la isla.
Canciller de Cuba rechaza declaración de la UE sobre disturbios
Cuba rechazó este lunes las declaraciones del Alto Representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, sobre los disturbios del 11 de julio del pasado año.
El canciller de la isla, Bruno Rodríguez, dijo en Twitter que la UE carece de autoridad moral para realizar juicios de valor sobre la realidad cubana.
Añadió que ese bloque debería ocuparse de sus propios problemas y las frecuentes violaciones de derechos humanos de sus Estados miembros.
Este lunes Borrell emitió una declaración sobre las manifestaciones del 11 y 12 de julio de 2021 en la que no menciona las causas y obvia la influencia del gobierno estadounidense en su desarrollo.
Cuba y la Unión Europea firmaron en 2016 un acuerdo de diálogo político y cooperación que sirvió como plataforma para establecer intercambios sobre temas de interés mutuo como los derechos humanos, las medidas coercitivas unilaterales y el desarrollo sostenible.
El gobierno cubano reconoció que en los disturbios del 11 de julio confluyeron diversas causas, entre ellas la situación económica y sanitaria del país, pero también reveló pruebas que evidencian el desarrollo de una operación comunicacional con origen en Estados Unidos para provocar un golpe blando.
Este fin de semana el presidente cubano Miguel Díaz-Canel dijo a la prensa que el 11 de julio los cubanos celebran la victoria sobre un intento de golpe vandálico y ratificó que las personas procesadas penalmente por estos actos contaron con todas las garantías constitucionales.
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