Apenas confirmadas las primeras reservas, Yosnel Quintero Ichazo jefe de venta del Grand Hotel Iberostar Trinidad, compartió la buena nueva con el colectivo de trabajadores de la instalación turística, que celebró la reapertura de los servicios y prodigó una cálida bienvenida a los primeros clientes.
“La apertura fue exitosa al lograr la ocupación de 31 habitaciones, de las 40 que dispone el hotel. En ello influyó todo el trabajo realizado con los turoperadores, agencias de viaje y receptivos para comercializar los servicios y promover las nuevas ofertas, entre ellas la posibilidad de hospedar adultos con niños —segmento de familia— después de ser aprobados todos los requisitos. Es nuestra principal novedad”, declaró Quintero Ichazo.
Durante la etapa previa al reinicio de las operaciones, el Iberostar Trinidad aprovechó el tiempo de aparente reposo para ejecutar trabajos de reparación y mantenimiento planificados, garantizar los procesos de capacitación del personal y ultimar detalles de cara al inicio de las labores de ampliación del hotel, primero con la categoría Cinco Estrellas de la provincia de Sancti Spíritus.
Manuel Vázquez Crespo, director general del centro turístico, comentó a Escambray que las acciones constructivas deben comenzar en los próximos meses y la ampliación estará lista en un año y medio aproximadamente, etapa durante la cual no se afectarán los servicios de una de las mejores instalaciones de su tipo y de su marca en el mundo.
Como una reanimación necesaria catalogó Vázquez Crespo el reinicio de la actividad turística en Cuba y en la Ciudad Museo del Caribe: “No podemos olvidar que aún nos encontramos bajo la amenaza de la pandemia, lo que exige mantener todos los protocolos, pero apostamos por la seguridad de la isla caribeña y los niveles de vacunación del pueblo cubano. El cliente percibe la disciplina de los trabajadores en cuanto al uso del nasobuco y el cumplimiento de las medidas higiénico- sanitarias y se siente protegido”, acotó el representante de la cadena Iberostar por la parte extranjera.
Y mientras el colectivo muestra los otros encantos de este hotel trinitario, donde combinan la profesionalidad de los servicios y el buen gusto en la decoración y ambientación, desde su responsabilidad como jefe de venta, Yosnel Quintero sigue de cerca la evolución de las reservas, el interés de los vacacionistas por viajar a la isla y a Trinidad, el comportamiento de los mercados emisores tradicionales, entre ellos Reino Unido, Alemania y Francia e, incluso, la incursión en otros segmentos como los circuitos y los grupos pequeños.
“La aspiración es mantener un nivel de ocupación favorable en esta temporada alta de turismo y asegurar el posicionamiento del hotel como uno de los mejores en los índices de satisfacción de clientes y entre los principales sitios de opiniones a nivel mundial”, concluyó Yosnel.
LOS TURISTAS TRAEN EL CORONAVIIRUS Y LA MUERTE.
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