San Isidro de los Destiladeros se desnuda (+fotos)

Los estudios arqueológicos regresan al Valle de los Ingenios. Y en esta ocasión para darle continuidad a los Talleres Nacionales de Arqueología de la Industria Azucarera, en su reciento permanente de San Isidro de los Destiladeros, en su versión XIX.

Las primeras jornadas de excavación en el barracón sur de la otrora fábrica de azúcar reveló en las habitaciones 12 y 13 los primeros hallazgos, según precisiones de Leonel Delgado Ceballo, especialista principal del Departamento de Arqueología de la Oficina del Conservador de Trinidad.

“Los trabajos iniciales sacaron a la luz objetos de trabajo relacionados con la carpintería como suelas y clavos de sección cuadrada y de hongos que se utilizaron en la decoración de las puertas.

“También hemos encontrado restos de vajilla inglesa decoradas con impresión de transferencia, platos adornados con bordes de conchas, utensilios domésticos, machetes y fragmentos de hormas de barro cocido para moldear y clasificar el azúcar.

Como un detalle que va más allá de lo curioso, el especialista hizo referencia al hallazgo de botellas de cerámica originales de Inglaterra utilizadas para envasar bebidas, particularidad que al decir de muchos de los especialistas que participan en las investigaciones de campo,  abre luces a las hipótesis de trueques y contrabando típicos de la época en lo que llegó a ser el mayor emporio azucarero mundial.

A partir de las excavaciones  se han determinado los negativos de los pisos y losas de cerámica que los conformaron.

Delgado Ceballo puntualizó que los elementos encontrados serán sometidos a un proceso de restauración y conservación y formarán parte del sitio arqueológico in situ en el otrora ingenio para que el visitante tenga una mayor proximidad a todas las interioridades del quehacer en la antigua fábrica de azúcar.

Estos descubrimientos y los que puedan suceder en las jornadas venideras enriquecerán el discurso museográfico del Sitio Museo San Isidro de los Destiladeros, único ingenio del Valle y del país que muestra al descubierto testigos del proceso industrial y de otras instalaciones de los añejos centrales azucareros.

Y ese mérito se deriva del Taller Nacional de Arqueología Industrial, auspiciado por la Oficina del Conservador de Trinidad, cuya primera edición se desarrolló en el año 2000 y hoy vive la XIX versión que se extenderá hasta la semana venidera, con la participación arqueólogos y otros especialistas de varias provincias del país, unidos en un evento de referencia para la arqueología industrial en Cuba.