Aun cuando restan dos meses para concluir el año, la labor de reciclaje en la provincia marcha por buenos senderos. Al cierre de septiembre, los resultados económicos superaron los 98 millones de pesos, a pesar de la situación financiera del país, que limita las importaciones, el desarrollo de inversiones y el accionar de algunas industrias aportadoras de materias primas para su recuperación.
Al decir de Ernesto Pérez Fleite, director adjunto de la Empresa Provincial de Recuperación de Materias Primas en Sancti Spíritus, en este propio período se superan también los compromisos exportables, con surtidos como la chatarra de aluminio, bronce, cobre, de acero inoxidable y la electrónica.
“Estamos hablando de un real en toneladas totales de 437, cuando lo previsto eran 358 —dice Pérez Fleite—, así como unos 69 millones de pesos en moneda nacional, de un plan de 52.6 millones en correspondencia con la tasa de cambio aprobada que es de 1×120 CUP, aunque por cada dólar que exportamos nuestra empresa recibe 0.46 centavos, con los cuales nos reaprovisionamos de piezas de repuesto, gomas, baterías y otros recursos”, apuntó el directivo.
La propia fuente informativa dijo que para paliar la situación del desabastecimiento en algunos sectores que generan material reciclable, han debido poner en práctica algunas estrategias que comenzaron desde el 2020, en plena pandemia, toda vez que las reservas de materias primas se concentran en el sector residencial, por tanto, desarrollan lo que han llamado la política de acercamiento de la recuperación a la población.
En este sentido se intensifica, además, la labor con las diferentes organizaciones en cada barrio, con el objetivo de recolectar las materias primas existentes en las viviendas, además de que la población puede realizar sus ventas de lunes a sábado en la red de puntos fijos para la recuperación de materias primas, que ya suman 20 y están diseminados por todas las cabeceras municipales.
“En esas tiendas —añade Ernesto— se compran metales no ferrosos, papel, cartón, frascos de vidrio de diferentes tipos, plásticos… con precios tentadores, pues se han incrementado sus cuantías en varias ocasiones, a fin de estimular la recuperación, además de que el pago se realiza en efectivo al momento”.
Las tiendas móviles es otra de las modalidades implementadas para la recuperación, pues las mismas funcionan con un sistema de rotación para que en determinado día de la semana o el mes, acudan a las comunidades donde se promueve la compra de materias primas.
Pero están también los convenios de trabajo con los CDR, la FMC, la OPJM, la FEM y la FEU, que trabajan conjuntamente con la empresa recuperadora para que, además de divulgar la importancia del reciclaje, realicen festivales de Materia Prima, con la participación de los miembros de estas organizaciones.
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