“Los incendios que hemos tenido en viviendas se reportan como catastróficos, pues al fragmentarse las partículas que integran las baterías, estas se encuentran con el combustible y por ello la propagación es tan rápida. No debemos olvidar tampoco que el humo emanado es tóxico y afecta la vida de las personas”, aseguró a Escambray el teniente coronel Ernesto Antonio Triana Caturla, jefe del Comando Provincial de Bomberos de Sancti Spíritus.
Estos accidentes son cada vez más frecuentes en la provincia y se han convertido en muy peligrosos por la magnitud que suelen alcanzar. El municipio cabecera y específicamente el Consejo Popular Kilo-12, es el de mayor incidencia; aunque Trinidad y Cabaiguán también se consideran territorios con altos índices.
De acuerdo con el oficial, las altas temperaturas y la humedad inciden en el incremento de estos siniestros y agregó que, en muchas ocasiones, suelen tener un desenlace fatal para las víctimas: “Lamentablemente tuvimos hace poco un caso en Cabaiguán, donde una menor perdió la vida. Transmitimos una vez más las condolencias a los familiares,” expresó el jefe del Comando Provincial de Bomberos de Sancti Spíritus.
Los incendios de vehículos eléctricos o motorinas tienen como principales causas el empleo de cargadores no idóneos, la eliminación de los dispositivos de seguridad originales, el uso de adaptaciones eléctricas impropias, así como las baterías fabricadas por personas sin autorización para ello; el empleo de tomacorrientes defectuosos, exposición a altas temperaturas, realización de cargas con exposición directa al sol y el incorrecto fregado de los mismos.
Al ocurrir estos incendios es recomendable llamar de inmediato al 105, y en caso de intentar sofocarlos debe hacerse de inmediato con agua; no obstante, si es evidente que el siniestro ha tomado dimensiones elevadas no se debe intentar extinguirlo.
Debido a las terribles consecuencias que estos accidentes acarrean es importante prevenirlos, para ello se recomienda dejar enfriar la batería a temperatura ambiente, antes y después de comenzar la carga por aproximadamente 45 minutos, mantener los dispositivos instalados de fábrica en el vehículo, no realizar adaptaciones que alteren los parámetros establecidos por el fabricante de la moto, emplear para la carga instalaciones eléctricas en adecuado estado y utilizar dispositivos de conexión certificados.
También mantener las motos en lugares ventilados y no dejarlas en las entradas de las viviendas o lugares que obstruyan la salida y evacuación de las personas en caso de accidente.
Estudiante de Periodismo *
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