Más de 300.000 clientes del sur de Estados Unidos seguían sin electricidad el lunes tras las tormentas del fin de semana, ante lo cual los residentes buscaban ayuda mientras las altas temperaturas continúan azotando la región.
Al menos una persona en Oklahoma falleció debido a los prolongados apagones, indicaron funcionarios.
La gran mayoría de los cortes de electricidad ocurrieron en Oklahoma, donde intensas tormentas el sábado por la noche traían vientos de hasta 128 km/h (80 mph) en las inmediaciones de Tulsa, según el Servicio Meteorológico Nacional. Unos 165.000 consumidores en diversas partes de la ciudad seguían sin luz el lunes mientras las cuadrillas se apresuraban a reparar más de 700 postes dañados, así como cableado derribado, comentó Amy Brown, portavoz de la Compañía de Servicio Público de Oklahoma.
Una persona que utilizaba un respirador perdió la vida debido al apagón, informó el alcalde de Tulsa, G.T. Bynum, en una conferencia de prensa.
Las empresas proveedoras de electricidad advirtieron que algunos de los apagones podrían no quedar resueltos sino hasta finales de la semana, y Bynum instó a los residentes a tomar en consideración a familiares y vecinos que dependen de equipo médico electrónico.
“Por favor, revisen que se encuentren bien”, subrayó.
En total, Oklahoma, Texas y Luisiana tenían más de 300.000 consumidores sin luz hasta el lunes por la tarde, según el sitio PowerOutage.us.
En Luisiana, las autoridades cerraron más de una veintena de oficinas estatales el lunes debido a los riesgos por el mal tiempo. Además de los apagones, la ola de calor seguía generando peligrosas temperaturas que rondan los 40 grados Celsius (100 Fahrenheit) en Texas, por lo que algunas partes del estado se encontraban bajo avisos de calor excesivo que continuarían al menos hasta el miércoles.
“Ha sido insoportable”, se quejó Leigh Johnson, residente de Mount Vernon, Texas, a la televisora de Dallas KXAS. Ella no ha tenido electricidad durante unos tres días.
“Ha sido horrible porque el índice de calor ha sido tan alto que, literalmente, hemos tenido que darnos baños de agua fría para refrescarnos. Nuestros animales también, estamos teniendo que meterlos en la bañera sólo para evitar que tengan un golpe de calor; así de difícil ha estado”, lamentó.
Unos 4.000 clientes seguían esperando que se restableciera el suministro eléctrico en la localidad texana de Perryton tras el paso de un devastador tornado la semana pasada.
Los apagones también se extendieron a Mississippi, donde algunas personas tuvieron problemas para obtener medicamentos después de que la falta de suministro eléctrico obligo a cerrar farmacias y tiendas de alimentos, de acuerdo con la cadena WLBT-TV. Mientras las cuadrillas trabajaban para restablecer el servicio en Mississippi, varios tornados arrasaron el estado durante la noche, dejando un muerto y casi una veintena de heridos.
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