Hace unos 10 días, el espirituano Francisco Reyes, más conocido por Pancho en su vecindario del reparto Carlos Roloff, despertó sobresaltado: “Mi hijastro se iba a sembrar tomates en el campo y se levantó como a las cinco y media de la mañana. Enseguida me llamó asustado porque cuando llegó al garaje lo encontró abierto y vio que nos habían robado el motor y la motorina.
“Figúrese, me tiré asustado y fui corriendo para allá. Me puse nervioso, me sentí muy mal. Llamamos a la Policía, ellos vinieron y actuaron rápido. Cuando me avisaron esa misma tarde que tenían a los ladrones ubicados me puse muy contento porque esos bienes nos costaron mucho, figúrese que hoy se valoran en más de 800 000 pesos. Son medios de transporte que uno necesita, ahora mismo está la suegra ingresada y hacen falta para ir al hospital. Tenemos tremendo agradecimiento de los compañeros del Ministerio del Interior, trabajaron con el amor más grande del mundo, todo lo esclarecieron y lo resolvieron enseguida”.
En la madrugada del pasado 7 de febrero, sigilosamente los inculpados se colaron en el garaje de la familia de Pancho, ubicado a apenas unos metros de su casa, construido con solidez y cerrado con varios candados.
Pero, seguramente, los autores de este robo con fuerza habían estudiado bien el terreno y lograron sacar de allí el motor Minsk y la motorina roja, lo más probable para venderlas luego en las elevadas cifras de dinero que hoy se cotizan en el mercado.
Sin embargo, ya los combatientes del Minint andaban tras su pista, quizás relacionada con hechos anteriores de robo de este tipo de medios de transporte y, en apenas unas horas, detuvieron a tres ciudadanos de este municipio, procedieron al registro domiciliario y durante los interrogatorios uno de ellos confesó.
El pasado martes, luego de la reconstrucción de los hechos y con la presencia de los vecinos de la comunidad, representantes del Minint en el municipio devolvieron los artículos robados a Pancho y su familia, excepto la batería de la motorina, que aún no han podido localizar.
Uno de los encartados ya se encuentra en prisión provisional, otro se mantiene con una medida cautelar de obligación contraída en acta y al tercero se le solicitó a la Fiscalía mantenerlo también en prisión provisional.
Durante el acto en el reparto Carlos Roloff, los combatientes del Minint insistieron en la importancia de que la comunidad también contribuya al orden interno; además, comentaron que esclarecer un hecho y devolver las propiedades a sus dueños constituyen la cúspide de su trabajo porque los llena de satisfacción resolver estas molestas situaciones.
Este hecho demuestra que cuando todos los factores nos unimos, cuando existe una comunidad activa, se acciona con rapidez y juntos enfrentamos el delito logramos resultados, reflexionó en el lugar el teniente Coronel Abel Estrada, jefe del Minint en el municipio espirituano.
Y agregó que en el barrio debemos cuidarnos y colaborar para que este fenómeno social se reduzca a la mínima expresión porque la crudeza de estos tiempos, las necesidades que existen no constituyen una justificación para cometer delitos y vivir del robo.
“Queremos que este ejemplo sirva para seguir preservando los bienes de todos, manteniendo el orden interior y la seguridad del Estado, para así también seguir preservando a la Revolución”, concluyó.
Felicidades para todos.
Peros los afectados por estos echos. ¿CUANDO HABRÁ UNA RESPUESTA? Ya han pasados varios meses…. y nada
Es bueno que estas acciones se publiquen y que cuando se dicten las sentencias, que deben ser ejemplarizantes, también se den a conocer.
En mi barrio, entre Rosario y Agramonte, han habido varios robos con fuerza, sobre todo de balitas de gas y no han detenido a los culpables.
Ponen los aciertos, pero los desaciertos? Como por ejemplo robos que se estan dando en casas hace mas de un año con un mismo modo operandi y aún nada.
Felicidades a esa familia. A esos combatiente del MININT el agradecimiento eterno. Pero cabe señalar que es suerte y el único caso resuelto de 10 robos que suceden al día. Están el vandalismo y el descaro en todas las esquinas. Suerte a los demás. Y ojala que sigan apareciendo. Ahhh un detalle en esa entrega se pierde tiempo en esclarecer otro hecho.