Desde hace unos días circula en redes sociales un rumor relacionado con la venta en el mercado informal de la ciudad espirituana —específicamente en la zona del Reparto Escribano— de aceite de comer supuestamente adulterado con aceite de avión o aceite de transformadores.
Escambray inquirió al respecto al teniente coronel Abel Estrada, jefe del Ministerio del Interior (Minint) en el municipio cabecera, quien aseguró que no han recibido ninguna información al respecto.
“No tenemos casos reportados de intoxicación por esa causa en las instituciones sanitarias del territorio. Tampoco hemos recibido denuncias sobre ese tema, ni se han ocupado productos con esas características físico-químicas o peligrosos como sería el aceite adulterado”, aseguró el directivo del orden interior aquí.
Por su parte, Isara Alvarado Gómez, jefa del Departamento de Inocuidad e Higiene de los Alimentos en el Centro Provincial de Higiene y Epidemiología, también confirmó que no han recibido ninguna inquietud de la población ni de los centros asistenciales relacionada con este rumor.
Además, agregó que habitualmente esta institución se encarga de analizar el aceite a granel que se distribuye por la canasta básica antes de su expendio a la población y en esos análisis físico- químicos ni en sus características organolépticas —olor, color y sabor— se ha detectado ninguna falsificación.
Aclarar cualquier rumor al respecto resulta vital en los tiempos actuales cuando el déficit de aceite en el sistema comercial ha provocado que muchas personas busquen adquirirlo en el mercado informal, sin conocer exactamente su procedencia y a precios exorbitantes que hoy rondan los 1 500 pesos.
Según sitios especializados consultados por Internet, la intoxicación con aceite combustible ocurre cuando alguien ingiere, inhala o toca dicha sustancia tóxica que como ingrediente dañino contiene hidrocarburos.
Su ingestión puede provocar dolor de garganta y abdominal, sangre en las heces, diarreas, náuseas y vómitos que pueden contener sangre, entre otros síntomas.
En esos casos, los expertos recomiendan buscar asistencia médica de inmediato. El pronóstico depende de cuánto aceite combustible haya ingerido la persona y de la prontitud con que comience el tratamiento. Mientras más rápido reciba ayuda especializada, mayor será la probabilidad de recuperación.
La deglución de dicho tóxico puede tener graves efectos en muchas partes del cuerpo, por ejemplo, las quemaduras en las vías respiratorias o en el tracto gastrointestinal provocarían necrosis tisular, lo que resultaría en infección, shock y muerte, incluso varios meses después de la primera ingestión de la sustancia.
Y, aunque afortunadamente en Sancti Spíritus no se han reportado estas emergencias, Escambray recomienda no comprar productos a ciegas y siempre intentar cerciorarse de que su procedencia implique una fabricación segura.
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