Aunque ha tenido excelentes gimnastas, nunca Sancti Spíritus había podido llegar tan alto en unos Juegos Centroamericanos. Por eso brilla tanto el oro que este lunes logró Diorges Escobar Olmo en los XXIV Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador.
Por primera vez un hijo de esta tierra se convierte en el gimnasta más completo de una cita regional, categoría que se otorga a aquel que gana el all around, o lo que es lo mismo, el máximo acumulador de puntos al dominar la mayoría de las seis pruebas que enfrenta.
Y eso hizo Diorges, que, aunque fue sorpresivo para muchos, había adelantado su hazaña desde el torneo por equipos cuando fue el competidor de más alta puntuación entre todos y quien guio a Cuba hasta la medalla de plata.
Para convertirse en el más completo, el muchacho de veinte años sumó 79.100 puntos, muy superior a los 78.900 del dominicano Audrys Nin y a los 78.150 del colombiano Dilan Jiménez.
El desempeño de Diorges fue estable y progresivo. Demostró capacidad competitiva y sangre fría, a la hora en que los nervios y la concentración suelen ser rivales contundentes. Así lo muestran las puntuaciones conseguidas: un sexto puesto en los ejercicios en el suelo: 13.100 puntos, quinto en caballo con arzones: 12.300, onceno en las anillas con una puntuación baja: 11.750, segundo en caballo de salto: 14.050, y broche dorado en barras paralelas: 14.150 y la barra fija: 13.750.
Dijo él mismo en declaraciones a la prensa acreditada en el evento: “Esta ha sido mi competencia más difícil y no me rendí hasta el final. Fue una competencia de mucho nivel y enfrentar a rivales como estos es una bonita experiencia. Desde que comenzamos en los aparatos sabía que podía llegar al primer lugar porque ya lo teníamos planificado. Aproveché que terminaba en la barra fija, mi aparato más fuerte, y así durante toda la competencia fui midiendo la cantidad de puntos que necesitaba para ganar.”
Pero al talento probado del muchacho, único cubano que asistirá este año a un Campeonato Mundial, se le unió otra fuerza mayor: el empuje de su mamá Diolis, que desde la distancia, venció el nerviosismo y le insufló energías positivas.
“Estaba muy nerviosa, comenta a Escambray más reposada, estaba viendo el televisor, esperando la noticia porque sabía que él estaba compitiendo. Estaban transmitiendo la pelota y en eso dan la noticia de su medalla de oro…”
Y le salió un grito de lo profundo del alma, para liberar horas de tensión desde el amanecer. “Empecé a dar gritos yo sola. No esperaba que hiciera algo tan grande, y no es que no confiara en él, pero cuando conversamos después que cogieron la medalla de plata por equipos, me comentó que los mexicanos estaban muy fuertes. Por eso me sentí más contenta y porque, hija, ellos allí llegaron como unos primerizos, como uno dice”.
Después todo fue cediendo, hasta que las emociones volvieron a subir al momento en que pudo verlo por la magia de internet: “Estaba muy feliz, me enseñó las dos medallas, la de oro y la de plata, las dos están lindísimas, ya también el muñequito que tenía encima de la cama.”
Y le dijo que va por más, porque todavía compite este martes y miércoles. Por eso Sancti Spíritus también estará atenta a los aparatos y los ejercicios de quien ya la puso en los anales de la historia centroamericana como el único gimnasta que ha ganado en esas citas, el título de más integral.
Diorges, felicitaciones eres un joven muy valiente, tú pueblo natal, tú querida madre y toda Cuba están muy orgullosos de tus medallas. te deseo exitos en tu desempeño este martes y miercoles. seguro vas por mas.