En lenguaje del béisbol, el average de los púgiles espirituanos en el Campeonato Mundial de Boxeo de Taskent 2023, Uzbekistán, sería bien alto, pues al cierre de la jornada del jueves dos de los tres que toman parte en el certamen ya tenían una medalla en su cuello.
Tanto Alejandro Claro como Yosbany Veitía intentaban mejorar el color a su presea bronceada durante la velada semifinal de este viernes que coincidió con el cierre de la edición de Escambray y daba el acceso a la discusión de los títulos a los ganadores.
Lograr tal saldo es una actuación muy meritoria en un evento en el que Cuba vio sucumbir a sus hombres más encumbrados, al punto de quedarse incluso fuera de la discusión de medallas los bicampeones olímpicos Julio César La Cruz, cinco veces titular mundial, Arlen López y Ronniel Iglesias, a quien se sumó el tres veces campeón del orbe, Lázaro Álvarez, en lo que es la mayor sorpresa del Mundial.
Para Claro, representante de los 48 kilogramos, es por mucho el mejor resultado de su corta carrera. Antes de llegar a la cita, el debutante en estas citas solo archivaba una medalla de bronce en el Campeonato Nacional Playa Girón y una plata en la Copa Presidente, de Kazajastán. Además, el muchacho debió ganar sus pleitos con una herida en su ceja izquierda en su primer combate que puso en duda su seguimiento en el torneo, pero se recuperó y ganó otra vez para luego en la discusión del bronce emplearse a fondo ante el escocés Bashir Aqeel.
En el caso de Veitía, asegurar bronce en los 54 kilogramos es también el retorno al podio mundialista después de lograr oro, plata y bronce en estas ediciones. Ese resultado lo alcanza pese a la incertidumbre que ha creado su carrera en los últimos años en los que ha sido baja del equipo nacional y ha caído dos veces en los circuitos profesionales este año.
La derrota de los espirituanos fue a la cuenta de Jorge Cuéllar, quien cedió por bronce ante el indio Nishant Dev, en 71 kilogramos por decisión de 0-5, aunque puede considerarse un desempeño loable ya que es su primera gran competencia.
Seis cubanos trataban de cambiar ayer viernes el color de sus medallas en el Mundial, que cierra este domingo.
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