Al igual que las del resto del país, la Empresa Cárnica de Sancti Spíritus presenta déficit de materias primas, problemas con los portadores energéticos, falta de insumos y productos necesarios para garantizar producciones, pero ante tales disyuntivas busca variantes que le permitan dar continuidad a diversas elaboraciones.
Así lo informó a Escambray Donys Gómez Salas, director general de dicha entidad, y puntualizó que, gracias al esquema de integración con mipymes y otras formas de gestión no estatal, pueden adquirir materias primas como la harina de trigo, que se emplea como extensor en la elaboración de diversos surtidos.
Igualmente, destacó el encadenamiento con ventas online que les proporciona una fuente de financiamiento para la compra de materias primas cárnicas en el exterior, y puso el ejemplo de la adquisición de cuatro contenedores de MDM entre octubre y noviembre, con los cuales se aseguró casi el 70 por ciento de la producción de conformados.
“Esa es una posibilidad que nos ofrece las ventas en fronteras y el vínculo con las nuevas formas de gestión no estatal, con lo cual se formó un fondo de dinero, más de 300 000 dólares hasta la fecha, cifra que, en más del 64 por ciento, se destinó para adquirir el picadillo MDM, harina de trigo y materias primas no cárnicas, entre otros insumos que dan continuidad a los procesos”, acotó Donys.
El director de la Empresa Cárnica aclaró que, gracias a esta estrategia de negocio, en octubre se lograran cerca de 80 toneladas de embutidos, a partir de la carne de cerdo diferenciada y otros componentes para obtener el perro en ristra, que se comercializa en ferias y se entrega a organismos de la provincia a un precio de 285 pesos el kilogramo, con muy buena calidad y aceptación por la población.
Destacó que el país asignó un nivel de materia prima para la elaboración de mortadella, que se distribuye a través de la canasta familiar, a lo que se unen surtidos que se van dirigidos a la venta liberada y emplean las materias primas procedentes del propio encadenamiento con los diversos actores económicos.
“Nuestra empresa ha mantenido un suministro en el orden de las 150 a 200 toneladas mensuales a través de la Empacadora Roberto Quesada, del Combinado Cárnico y la Fábrica de Perros Calientes, productos que se comercializan mediante el sistema de Comercio y la Gastronomía o se destinan a cubrir las entregas para el encargo estatal y organismos priorizados”, refirió Gómez Salas,
“Lo cierto es —aclara el director— que mientras existen empresas del país con deudas en la distribución de varios meses, debido a la disminución en la entrega de la masa ganadera, algo que también afecta a este territorio, y aunque la demanda es superior a la oferta, el Cárnico de Sancti Spíritus cumplió este año con lo dispuesto para la canasta familiar normada, las dietas médicas, la carne para niños, la merienda escolar y los productos pactados para otros programas. En el 2024 tendremos mejores posibilidades porque estamos haciendo contrataciones con ese fin”.
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