Consciente de su rol como vanguardia artística, la filial de la Asociación Hermanos Saíz (AHS) en la provincia de Sancti Spíritus analizó este martes temas medulares como la publicación, promoción y comercialización de textos, la incorporación de otros miembros y la urgencia de dinamizar la vida cultural de la Casa del Joven Creador y de la ciudad toda.
Durante la asamblea de esta región central previa al cuarto congreso de la organización, proceso que se desarrolla por estos días en el país para conocer, además, el estado de acuerdos anteriores, Liset López y Dayana Margarita Pomares, dos de las afiliadas más reconocidas, insistieron en las nuevas formas en la que se gestiona la literatura producida por las noveles generaciones.
Tras un largo camino, como lo denominó la investigadora y escritora Liset López, en estos momentos ya está habilitado el local que servirá como Centro de documentación de la AHS espirituana, un viejo anhelo de sus miembros.
Mientras, se coordinan proyectos en alianza con la Cátedra Desiderio Navarro, de la Universidad de Sancti Spíritus José Martí Pérez, y está a punto de salir una compilación de textos esenciales a la luz de la Cuba actual que habla sobre lo que ocupa –y preocupa- a los investigadores más jóvenes.
Entre los asuntos más debatidos en la cita estuvo la publicación de los títulos Nomeolvides, de Erian Peña, y Escaleras al mar, de Lisbeth Lima, ganadores del Premio Casatintas en 2019 y 2021, respectivamente, concurso retomado por la filial del territorio a raíz de un reclamo del tercer cónclave de la organización.
De acuerdo con Luis Mateo Lorenzo, director de la Editorial Luminaria, aunque el primero de los volúmenes galardonados está casi listo para su salida y solo resta su encuadernación, la aparición del otro se ha visto limitada por la falta de insumos que afecta a la institución, lo cual, a juicio de algunos de los participantes en el intercambio, pudiera tener un impacto en las próximas convocatorias del Casatintas.
Fernando León, viceministro de Cultura, recordó en este sentido las restricciones de la Isla para disponer de papel en un contexto cada vez más complejo y subrayó que, sin renunciar al olor a tinta y al placer que produce siempre la lectura del libro impreso, es necesario transformar la mentalidad y acudir a las plataformas digitales, las que, incluso, ponen a disposición de los autores diversas herramientas.
Lo importante, apuntó Rafael González, presidente nacional de la AHS, es que el texto salga, de una u otra forma, que se conozca, que se divulgue.
Otras de las intervenciones giraron en torno al insuficiente movimiento de creadores –y creaciones- en la sede de la organización, y la urgencia de revitalizar la vida cultural de esta, y a la conservación del patrimonio escrito; en tanto, entre los resultados de la etapa figuran los avances de los trabajos constructivos en el inmueble que acoge la célula del gremio en Trinidad y la llegada de un donativo de instrumentos musicales.
Esta es una filial que tiene dos células: una en Jatibonico, con una amplia programación, y otra en la localidad trinitaria, donde su membresía tiene que mantener esa jerarquía, pues muchas veces se está ante un consumidor foráneo que viene buscando estereotipos artísticos y que en este lugar encuentra un espacio de resistencia cultural, subrayó el propio González en declaraciones a la ACN.
Al ahondar en las particularidades de la AHS hoy, refirió que bebe constantemente de los jóvenes a los que representa; es una organización que se repiensa todos los días, acotó, estamos hablando de una vanguardia artística que tiene una obra con una calidad reconocida, pero que también es protagonista de los procesos que acontecen en la nación.
Como parte de la asamblea, se eligió a la delegación espirituana al cuarto Congreso de la asociación y a la presidencia provincial, al frente de la cual se ratificó a la actriz Lil Laura Castillo.
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