Aun con las carencias que ha sorteado Ediciones Luminaria en los últimos años, propuestas espirituanas estarán presentes en la 31 Feria Internacional del Libro de La Habana.
Esta vez solo dos novedades bajo esa firma acapararán la atención de los públicos que visiten el 13 de febrero el Palacio de los Capitanes Generales de la capital.
“Cuentos de Aludie, de Alberto Rondón Ayala, y Aleteos divertidos, de Luis Antonio Morales, fueron los que finalmente pudimos imprimir —dice Luis Mateo, al frente de la editorial yayabera—. No es un secreto la compleja situación de nuestra institución con los insumos, lo que ha imposibilitado contar con un mayor número de textos”.
Dichos títulos integran el plan editorial del 2021, el cual asume los de mayor interés de las propuestas que llegaron durante los tiempos más complejos de la covid y no se realizó ninguna acción en la gestión de sacar a la luz un texto.
“Pero, junto con esas novedades, creímos que merece ese tipo de promoción y se suma a la expedición espirituana a la Feria el libro Cuaderno de la España entrañable, de Ramón Luis Herrera, ya publicado con anterioridad”.
Sin tiempo que perder, en Luminaria no se cruzan de brazos, a fin de contar con otros títulos para cuando plante bandera aquí el mayor suceso editorial del país, en marzo venidero.
“Acaba de salir Explorando Fomento, de Bárbaro Pérez Colina, pero no dio tiempo para que pudiera ser llevado a La Habana. Junto a esos tres nuevos libros, aspiramos a tener dos más y nos quedarían de ese plan del 2021 seis en espera. Para cumplir estamos haciendo un esfuerzo extraordinario”.
De acuerdo con Luis Mateo, el plan del año 2022 estuvo pausado por insumos como tinta y papel, una problemática que no encuentra solución, aunque hoy Luminaria tiene una mejor situación técnica al contar con una computadora e impresora de última generación.
“El dinero que se necesita para producir no se ha podido obtener. Para que se tenga una idea de lo serio del tema, todos los insumos del sistema de editoriales territoriales se compran con divisa. A nivel de país hay una necesidad de 2.9 millones de dólares para hacer funcionar cada una de las instituciones que la integran. Y el Instituto Cubano del Libro solo tiene 200 000 dólares, que apenas da para mover la poligrafía nacional de plan especial, donde hay 11 libros con alrededor de cinco años en espera por publicar. Se han priorizado los títulos de mayor interés para expender en esta 31 Feria Internacional del Libro de La Habana”.
Por su parte, Julio Miguel Llanes también asistirá a la gran fiesta, el próximo 17 de febrero, para dar a conocer Los caminos del viento, premio en la categoría novela en el Concurso Alejo Carpentier 2020 y bajo el sello de la Editorial Letras Cubanas.
La Sala Portuondo de la Universidad de San Gerónimo, en La Habana Vieja, será testigo de la presentación de la historia que nos conduce a la Trinidad del siglo XIX, dibujada desde las esencias de nuestra historia e identidad cultural.
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