Un corazón rojo es la puerta al otro mundo. En pequeña escala, una casa de la más encumbrada burguesía parisina se abre ante los ojos curiosos que traspasan el íntimo espacio. Cenefas, columnas, muebles…, un nivel de detalle impresionante. Se hacen las luces, y la narración presenta a Bebé y el Señor Don Pomposo.
Sucede similar en las otras dos diminutas escenas que también se resguardan en el interior de las cajas blancas donde descansa la imagen del busto de José Martí, a semejanza del que ofrece la bienvenida en todos los centros escolares del país.
“Surgió como un reto porque honrar al Apóstol siempre resulta muy difícil —alega como carta de presentación Yojandri Naranjo, Pachy, director de Parabajitos, proyecto espirituano responsable de esta nueva propuesta—. Apostamos por la técnica del teatro Lambe Lambe, una verdadera novedad para las artes escénicas en Cuba”.
El primer coqueteo con ese tipo de espectáculo de teatro de animación en pequeño formato lo hicieron al finalizar el 2022 y como recomendación del Consejo Nacional de las Artes Escénicas diseñaron una obra más teatral.
“La idea de homenajear a nuestro Héroe Nacional fue de nuestra productora Yanet Guerra Martínez. El primer paso complejo fue seleccionar dentro de tanta obra legada y apostamos por además de Bebé…, El camarón encantado y Nené traviesa. Cada uno tiene enseñanzas que nos interesa mostrarles a los públicos.
“El primero nos hace reflexionar sobre las huellas de las diferencias de clases y cómo precisamos tener los mismos derechos como seres humanos. El segundo, a nuestro juicio, muy presente en la actualidad al dejarnos arrastrar muchas veces por la avaricia, las cosas materiales… Y el tercero es para demostrarles a los adultos que los menores de edad actúan y piensan de acuerdo con sus grupos etarios”.
Pero, la gran novedad de este sincero homenaje es la forma en que lograron materializarlo todo el equipo y colaboradores de Parabajitos. Mantener la atención de quien se sienta frente a la caja y mira por el orificio con los audífonos puestos para escuchar las historias que transcurren en la pequeña escena no es cuestión fácil.
“La técnica Lambe Lambe surgió en 1989 en Brasil. La intimidad del espectáculo es su mayor característica. Aquí en Cuba, específicamente en La Habana, hace unos años hubo un intento de llevarla a escena, pero quedó en eso, en un intento.
“Nosotros nos aventuramos en el 2022, pero con algo más sencillo como nos dijeron los compañeros del Consejo Nacional, una especie de video musical. Por eso, esta idea sí la llevamos en grande. Utilizamos títeres hechos con foamy, gracias a la maestría artesanal de una joven que nunca había creado para el teatro. También recreamos con todos los detalles las escenas: cenefas, piso de la época, arroyo, palma… Cada uno pensado desde el punto de vista del factor sorpresa. Por eso, una columna se convierte en cocina, aparece y desaparece una pared para llevarnos a otra escena… Y claro, recreado con el sonido y luces que cambian”.
Bajo esos conceptos se disfruta de Corazón martiano, integrado por una trilogía de cuentos que transcurren en el interior de tres cajas convertidas en el más moderno de los escenarios teatrales que se puedan conocer. Bebé con su pelo rubio ensortijado, el camarón que intenta complacer los más estrictos caprichos y Nené, con la curiosidad a punta de ojos se nos hacen demasiado cercanos.
“Fueron meses de duro trabajo y debemos agradecer a todas las personas que nos ayudaron. En especial al Grupo dramático Hugo Hernández de Radio Sancti Spíritus, donde grabamos los tres cuentos con varios de sus actores, junto a los de nuestro proyecto. Utilizamos como narrador a Ernesto Valdés y en la técnica contamos con las maestrías de Olga Lidia Hidalgo y Jailer Cañizares”.
Pero, Corazón martiano logra un ambiente mágico no solo en el contacto con las cajitas de color blanco que sostienen la imagen del busto del Apóstol —“no podía ser otro el color porque el autor de La Edad de Oro es sinónimo de pureza”, acotó Pachy—, sino desde que los públicos aceptan la invitación de dialogar con alguno de los tres cuentos que no llegan a los 10 minutos de duración.
“Para llegar hasta donde se narran las historias se debe pasar por un arco que representa la portada del libro, donde se recopilan los cuentos. Y mientras camina pasa por el lado de unas banderitas blancas que tienen impresos Versos sencillos, pues de esa forma, además de familiarizarse con esos textos, pueden incentivarse en buscar otras publicaciones martianas. Detrás de ese gran escenario proyectamos imágenes de la vida y obra del Héroe Nacional. Así, mientras esperan por sentarse frente a las cajitas, pueden dialogar con ese infinito legado del autor de Ismaelillo”.
Fue ese el regalo especial del proyecto Parabajitos, estrenado justo el día en que se honró el aniversario 170 del natalicio de José Martí. La glorieta del parque Serafín Sánchez Valdivia, de la ciudad del Yayabo, fue testigo de cómo muchas generaciones experimentaron un diálogo más cercano con la obra martiana, gracias a la magia teatral.
“Ya forma parte de nuestro repertorio y por las propias características de la técnica Lambe Lambe resulta propicia para compartirla en los escenarios por donde nos movemos”.
De ahí que este nuevo montajellegará sobre los hombros de este proyecto que, por contar con una sala en malas condiciones, está obligado a llevar el teatro a otros escenarios. Una estrategia que les ha permitido seducir a muchos públicos: citadinos y rurales, quienes, a partir de este momento, sin dudarlo, podrán descubrir mucho más a Martí con solo mirar a través del corazón.
Excelente reseña,para excelente espectáculo:Gracias a Pachy y su Barabajitos,gracias a Lizandra por referir y hacer memoria del arte del teatro en nuestro territorio:!!!felicidades!!