Cuando en 1958 el eminente científico Antonio Núñez Jiménez, en una de sus expediciones a Caguanes, aseveró que en la Cueva de Ramos se encuentra el más importante y bello dibujo rupestre de todo ese interesante escenario natural, dejaba claro que el lugar sería un sitio de privilegio para la ciencia.
Aquel hallazgo, sobre una cuchilla de la pared a una altura de 1.20 metros del suelo estructural de la gruta y a 20 de la dolina de entrada, orientado hacia el norte y con una grafía de color negro (predominante en ese sitio), es además el centro de interés del conjunto de 24 pictografías de esa caverna, bautizada como la catedral del arte rupestre en Cuba.
Habitada hace unos 2 000 años por comunidades aborígenes que dejaron plasmadas en techos y paredes sus mitos, leyendas y tradiciones, Caguanes resguarda también matices distintivos si de pictografía se trata.
Carlos Alemán Luna, especialista del Parque Nacional Caguanes, aporta luz y refiere que entre las distinciones se encuentran la Solapa de las manos rojas, en Cayo Lucas, con ocho conjuntos pictográficos y unos 800 elementos, con dibujos que no abundan en el Caribe.
En Caguanes existe un área de pinturas rupestres de gran valor, por su identidad de estilo, sus dibujos son geométricos, ya sean circulares, triangulares o de otros tipicidades y también abundan los motivos hojiformes y rediformes.
Con todas estas particularidades —dijo Alemán García— es posible abrir salas expositivas en el sistema cavernario, una novedad para un mejor entendimiento del arte rupestre en particular y de las potencialidades arqueológicas del PNC, en aras de potenciar el turismo de naturaleza y el científico de manera excepcional.
Desde Cayo Aguada hasta Cerrotico de Judas se extiende el área que ocupa el actual Parque Nacional Caguanes, más de 22 000 hectáreas de mar, cayos y tierra firme.
Cuenta hoy con 62 sitios arqueológicos donde convergen los rituales, económicos y funerarios, que le añaden valor a este escenario geográfico, tiene en la Ciénaga de la Guayabera el hábitat de la grulla cubana, el ave de mayores dimensiones en el país y cuenta con el privilegio de una flora y una fauna paradisíacas, que incluyen 19 especies de murciélagos, algunas exclusivas de esta comarca.
El PNC también revela elementos emblemáticos de la región, como los conocidos cayos de piedra, Lucas, Salinas, Fábrica, Obispo y Palma, Ají Grande y Ají Chico, formaciones geológicas del Mioceno, reconocidas como únicas de su tipo en el país y el Caribe, con cerca de 80 cuevas del tipo Caguanes, en las cuales los frecuentes derrumbes de sus techos crean dolinas, salones y otros accidentes de excepcional belleza.
Este bello panorama se constata en el interior de las cuevas de Caguanes. Cayo Palma, uno de los de piedra que sirve de sitio de alimentación y refugio al flamenco rosado.
¿Qué es redondancia? ¿Algo que tenga que ver con el reguetón?
Este Parque Nacional está incluído en la propuesta para su inclusión (valga la redondancia) en la Lista Indicativa para su declaratoria como Patrimonio de la Humanidad.