A partir de que en Cuba la salud es sagrada, el personal médico, junto al resto del colectivo del Hogar Materno de Taguasco, labora incasablemente en aras de garantizar los cuidados necesarios a las embarazadas del territorio, además de evitar los nacimientos de bajo peso y la prematuridad.
En la calle Libertad se encuentra ubicado el centro asistencial de la cabecera municipal —único en Taguasco—, edificación que, desde su reapertura hace dos años, aloja en las mejores condiciones posibles a las gestantes.
Actualmente se encuentra a un 93 por ciento de su capacidad. De 15 camas con las que cuenta la instalación, por lo general hay 13 o 14 ocupadas.
Por otra parte, el índice de abandono es de un 32 por ciento Esther María González Cañetes, licenciada en Enfermería y asesora del Programa de Atención Materno Infantil (PAMI) en dicho territorio, sostiene que «en este propósito son importantes organismos como educación, cultura, Inder, FMC, y otros, que son los encargados de que a la gestante no le falte la distracción».
Agregó que la alimentación de las ingresadas se garantiza con un presupuesto designado para la compra de alimentos en las instituciones; además del aporte que realizan otras entidades. “También hay una cuenta que garantiza la compra de medicamentos a nuestras instituciones, que se distribuye en las farmacias y de ahí se realizan los despachos de los fármacos necesarios», afirmó la asesora del PAMI.
A pesar del déficit de combustible existente en el país, se le da prioridad a los turnos médicos y los remitidos, los cuales se realizan en transporte sanitario. Además, existen consultas especializadas para el tratamiento de diferentes patologías en las gestantes.
Se le brinda especial atención al bajo peso al nacer, por lo que se realiza una reevaluación integral a toda embarazada con riesgo del crecimiento intrauterino, así como la prematuridad, quienes son remitidas a consultas provinciales en edades tempranas de la gestación.
*Estudiante de Periodismo
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