“Los Tribunales de Justicia cubanos arriban hoy a medio siglo de actuación sistémica e interconectada, como resultado de la unificación, en diciembre de 1973, en una sola estructura jurisdiccional, de las distintas y diversas jurisdicciones y órganos judiciales que, hasta ese momento, funcionaban en el país, acontecimiento que señala el inicio de una nueva y superior etapa para la impartición de justicia en Cuba y, a partir de la cual, se comenzó a delinear, con mayor énfasis, la esencia genuinamente popular que le caracteriza; así como el desempeño, más efectivo y transparente, del servicio público que prestamos”.
Así reza en la carta de felicitación enviada por el presidente del Tribunal Supremo Popular, Rubén Remigio Ferro, a los jueces, directivos y trabajadores de los tribunales de la provincia de Sancti Spíritus, dada a conocer en el acto provincial por la joven Lídice Carballo Farfán.
Entre aquellas renovaciones, acometidas bajo la guía de nuestro líder histórico, el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, se emprendieron, tempranamente, notorios cambios en la organización y funcionamiento de la actividad judicial para barrer, radicalmente, con los males que caracterizaban a la administración de justicia del ignominioso régimen desalojado del poder, rememoró Elizabeth González Guardarramos, presidenta del Tribunal Provincial Popular de Sancti Spíritus, al pronunciar las palabras centrales de la conmemoración.
González Guardarramos señaló como un momento trascendental, en el marco de las transformaciones emprendidas por el país en 1973, la promulgación de la Ley No. 1250 de Organización del Sistema Judicial, que entró en vigor el 23 de diciembre de ese propio año, fecha en que quedó constituido el Tribunal Supremo Popular y tomaron posesión de sus cargos los jueces que integraron dicho órgano y los tribunales provinciales populares, para instituirse así un sistema único de tribunales de justicia, con objetivos y funciones definidas, que cumpliría su importante misión de manera coherente y cohesionada; suceso relevante para la historia del Derecho y la Justicia cubana.
A partir de esa norma quedaron establecidos principios cardinales de la impartición de justicia en el país, como son los de independencia judicial, concepción unitaria y sistémica de la jurisdicción, participación ciudadana en los tribunales, carácter electivo, inamovible y revocable de los jueces, entre otros que, en conjunto, consagran la legitimidad y la esencia democrática que identifican a la actividad judicial nacional, argumentó la presidenta del Tribunal Provincial.
“No podemos dejar de mencionar, en esta ocasión, a las mujeres y hombres que, junto a los profesionales, participan de la impartición de justicia desde su condición de jueces legos, como fórmula auténtica, de innegable carácter democrático y popular, de intervención directa de la ciudadanía en uno de los ámbitos más significativos de expresión del poder del Estado, como es la actividad judicial”, sentenció finalmente.
Momento muy emotivo del acto lo constituyó la entrega de reconocimientos a quienes se han hecho merecedores de tales estímulos por su larga trayectoria profesional y digna entrega a la impartición de justicia. En ese contexto, tres juezas jubiladas: Miriam Isabel Blanco Peraza, Vivian Zulueta Ortega y María Isabel Montelongo García recibieron un presente y una espiga de flores de manos de tres jóvenes que se adentran con pasión en la honrosa profesión.
Igualmente, por acuerdo adoptado en sesión ordinaria del Consejo de Gobierno del Tribunal Supremo Popular, se otorgó el Reconocimiento al Mérito Judicial, máxima distinción instituida por el Sistema de Tribunales de Cuba, a la jueza espirituana Delfina Maricela de la Cruz Coll, que le fue entregado por la Presidenta del Tribunal Provincial de Sancti Spíritus.
También, a propuesta del Consejo de Gobierno del Tribunal Provincial, el Presidente del Tribunal Supremo Popular otorgó el sello conmemorativo Aniversario 50 del Sistema de Tribunales a Carmen Rosa Rojas Álvarez, presidenta de la Sala Segunda del Tribunal Provincial Popular de Sancti Spíritus, por su notable contribución a una justicia efectiva y transparente durante más de 30 años; reconocimiento que recibieron otros 10 profesionales de las esferas judicial y administrativa de la provincia. La entrega estuvo a cargo de Deivy Pérez Martín, primera secretaria del Partido en la provincia.
Por su parte, Alexis Lorente Jiménez, gobernador de Sancti Spíritus, entregó el certificado por 10 y por 30 años de servicio a varios trabajadores; en tanto, Elizabeth González Guardarramos, distinguió a Yamina de la Caridad Bernal Capote, presidenta de la Sala de Amparo de los Derechos Constitucionales.
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