Un jatiboniquense camino al congreso

Cuando Magdiel Balmaseda Pérez se graduó como técnico de nivel medio en Explotación del Transporte Ferroviario ni siquiera pensó que su destino sería la Planta Productora de Bandejas para Huevos, ubicada en el municipio espirituano de Jatibonico. 

Mas desde que puso los pies en este lugar, todo conspiró a su favor. En los primeros cuatro meses de labor, el joven transitó por los puestos de Operador de Planta Procesadora de Gas, Operador A de Máquina Moldeadora, y como jefe de Brigada.

Dichas responsabilidades le mostraron el ritmo de trabajo de la fábrica. Quizás por ello, cuando llegó a jefe de Producción y, más tarde, a director de la entidad, nadie le pudo hacer un cuento sobre el quehacer de la institución. Sabía de sobra los derroteros del sitio.

“La fábrica comenzó a producir el 17 de febrero del 2017. Aquí hay 54 trabajadores, y el 95 por ciento de ellos son jóvenes. La planta tiene seis años de explotación, por lo que la mayoría de las piezas de repuesto dependen de la importación. Y ante la situación económica que atraviesa el país, muchas las tenemos en falta.

“Sin embargo, hemos confiado en los jóvenes para, entre las Brigadas Técnicas Juveniles (BTJ) y los Comités de Innovadores y Racionalizadores de la fábrica, impulsar las innovaciones para mantener en pie las producciones”, refiere Balmaseda Pérez.

Con solo 27 años de edad, Magdiel ha tenido que aprender a buscar soluciones para no detener el trabajo. Eso sin contar que ha sido la dirección uno de sus grandes desafíos.

“Sí me ha costado trabajo dirigir. Para hacerlo hay que tener carácter, saber accionar, reaccionar y reflexionar. Aquí he obtenido muchas experiencias y, una de ellas, ha sido la de planificar bien mi trabajo.

“En la fábrica la mayoría de los trabajadores son jóvenes. Siempre me ha gustado trabajar con personas de esta edad, porque tienen muchas iniciativas en la mente. Soy el primero en estar con ellos, no solo para fiestas, sino para ayudarlos en sus problemas personales y familiares. Tengo un buen equipo aquí”, cuenta.

Unido al quehacer de la planta, este muchacho abona el trabajo de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC). Desde que integró las filas de la organización en el 2015, se ha desempeñado como secretario general de comités de base, presidente de las BTJ y miembro no profesional del Buró de la UJC en Jatibonico, e integrante del Comité y Buró Provincial de la UJC. En este último escaño, tiene Magdiel su espacio en la actual etapa.

“Mantengo las mejores relaciones con los jóvenes de la fábrica. Entre todos buscamos estrategias para motivarlos. Nunca se ha dejado de reconocer a los más destacados y a la brigada con mejores resultados productivos. Tampoco se les ha dado la espalda a los jóvenes con problemas en el hogar. Ellos han recibido el apoyo del centro”, agrega Magdiel.

A esta corta edad, el joven jatiboniquense advierte que el vínculo estrecho con las nuevas generaciones afianzará el trabajo de la UJC. Los tiempos son otros, y la organización tiene que parecerse a sus muchachos.

“El contacto con la base no puede decaer. La UJC debe trazarse metas y elevar su protagonismo. El arma fuerte de hoy son las redes sociales y tenemos que explotarlas mucho más. La juventud de estos tiempos es creativa. Por ello, debemos estimular ese ingenio para enfrentar los desafíos actuales”, destaca el director de la Planta Productora de Bandejas para Huevos.

Aun cuando Magdiel hace bien su trabajo y no descuida el rol de la UJC, nunca pensó haber sido electo como el primer delegado directo de Sancti Spíritus al XII Congreso de la estructura. El colectivo de la fábrica confió tan alta responsabilidad a este muchacho que sobresale como líder juvenil. 

“Sé que nuestra planta está desarrollando un trabajo intenso, pero me tomó por sorpresa que me hayan elegido para asistir a la magna cita. Es un gran honor para mí poder representar a los jóvenes de la fábrica, y a los de la provincia en este certamen”, señala.

Por estos días el director de la Planta Productora de Bandejas para Huevos, de Jatibonico, se muestra orgulloso y profundamente comprometido con quienes lo escogieron para dialogar en el congreso sobre las problemáticas que afectan a los de su generación. 

“Llevaré cada pensamiento de mis jóvenes. Soy testigo de obreros que defienden la economía y hacen que una fábrica marche al pie de la letra para que el territorio disponga del envase para trasladar los huevos hasta los hogares. Es una generación de impacto que pondremos bien en alto en el congreso”, apunta el directivo.

En abril del 2024 Magdiel estará dentro de los espirituanos que asistirán al XII Congreso de la UJC. Hasta allí llegará con el privilegio de haber sido escogido como el primer delegado directo del territorio a la magna cita.