Un Quijote de luz para todos los tiempos (+fotos y videos)

En un ambiente familiar, de esos que solo son posibles cuando convoca un líder auténtico, se habló en Sancti Spíritus de legado, de transformación en el quehacer mediático, de un modelo a seguir; Juan Antonio Borrego Díaz, el alma de Escambray, inspiró cada palabra de un coloquio que, en su primera edición demostró cuánto se puede hacer en bien del periodismo cubano.

Asistieron amigos, lectores, colegas, profesores universitarios, estudiantes. Todo el que lo deseó hizo suyo el micrófono y, despojado de formalismos, como siempre, llamó Borrego al diálogo. Afloraron experiencias, recuerdos, valoraciones sobre el reportero y director de un periódico que no entendió de fatalismos geográficos para erigirse como uno de los mejores medios públicos de Cuba.

Pastor Batista, quien compartió junto a él vivencias inolvidables de sus casi 29 años como corresponsal del periódico Granma, enalteció sus peculiares técnicas de dirección, tal vez un caso inaudito en nuestro gremio. “Su liderazgo real de autoridad, que se gana al frente de un colectivo, fue el secreto de todos sus resultados, y los seguirá teniendo como eterno timonel de Escambray”, apuntó.

Por razones como esta, al eterno soñador y adelantado en los avatares de la comunicación se le ajusta el concepto de líder descrito tanto por académicos como por la vox populi. Dos años después de su partida física, esta cita une y convoca.

“Más allá de las fronteras, él despierta los mismos sentimientos de admiración, respeto y cariño que se sienten en Sancti Spíritus —señaló Ricardo Ronquillo Bello, presidente nacional de la Unión de Periodistas de Cuba—. Ese tema del liderazgo tenemos que desarrollarlo más en el sistema de prensa del país y en toda la sociedad cubana, donde tiene que ocupar un lugar importante si queremos avanzar en transformaciones tan profundas como las que nos planteamos”.

Tales transformaciones no son ajenas sistema de medios públicos, donde se intentan dar los primeros pasos de un nuevo modelo de gestión de prensa con los pies en la Cuba del siglo XXI.

“Todos tenemos un compromiso con el sostenimiento de ese sistema y con la modernización del mismo. Hay que ser un poco Quijote para seguir intentando lo que queremos lograr en Cuba”, añadió Ronquillo Bello.

Resultó trascendental para el encuentro la presencia de representantes de la Cátedra Honorífica Juan Antonio Borrego Díaz, perteneciente a la Universidad de Sancti Spíritus José Martí Pérez, institución que mantiene estrechos vínculos con espacios como Escambray, donde se hacen realidad muchas de las teorías que sostienen las ciencias.

Como colofón del evento se dieron a conocer los laureados del Premio Nacional sobre Periodismo de Investigación, ejercicio que ausculta, reflexiona y opina con sólidos criterios sobre las luces y sombras de diferentes contextos; el mismo que tanto desveló al paradigma del gremio que sigue siendo Juan Antonio Borrego.