Este viernes Yaguajay despertó más temprano que de costumbre. Cerca de las seis de la mañana se sintieron los primeros pasos de los pobladores que llegaron de diversas comunidades del norte espirituano para asistir al desfile por el Primero de Mayo y estremecer como siempre el Complejo Histórico Comandante Camilo Cienfuegos.
A ninguno de los asistentes le importó la madrugada y mucho menos recorrer el trayecto hasta este sitio histórico del territorio. Son trabajadores comprometidos con la obra de este país en el cual abonan su proyecto de vida.
Por eso no faltaron las banderas, los carteles y las frases inspiradoras para caminar ante la figura del Señor de la Vanguardia y dejar claro que esta fiesta proletaria se dedica a la heroicidad del pueblo cubano y a la responsabilidad de los trabajadores en consolidar el modelo económico-social de desarrollo que estamos edificando.
Encabezado por el Sindicato de la Educación, la Ciencia y el Deporte, el pueblo yaguajayense protagonizó un desfile en el que no faltaron la alegría y las iniciativas creadoras que muestran el empuje de un municipio con múltiples desafíos e inmensas ganas de hacer.
Distribuidos en siete bloques, los trabajadores del Transporte, las Comunicaciones, Construcción, Salud, la Industria Alimentaria, el Turismo, la Administración Pública, Comercio, y del sector Agropecuario, entre otros, arribaron hasta el Complejo Histórico con la voluntad de estar más unidos y avanzar en la inmensa obra de equidad y justicia social de la Revolución cubana.
Al encuentro proletario tampoco faltó el sindicato de la Cultura, que le impregnó colorido y entusiasmo a la celebración, donde, al compás de la conga, brillaron los principios y las convicciones de un pueblo que no renuncia a todo lo alcanzado. Y en otra muestra de continuidad y de no fallarle jamás a la Revolución también estuvo la juventud de la tierra de Camilo, que, junto a la clase obrera, patentizó que en sus manos está la fuerza necesaria para construir un país mejor.
Ronel Pérez Hernández, a quien le sobraron razones para llegar al desfile expresó: “Cada mayo siento orgullo de poder participar en este desfile. Es un momento de compromiso de todos los trabajadores con los retos que tenemos por delante, y la necesidad de hacer bien lo que nos toca desde cada ámbito de la sociedad.
“Por eso, caminar hoy delante de la figura inmensa de Camilo me renueva para seguir haciendo por Cuba, este país que adoro y defenderé con la fuerza de mi corazón”, agregó el joven que con solo 33 años lidera la Oficina de Administración Tributaria en Yaguajay.
Con este empeño salió a desfilar una multitud que estrechó sus brazos por la Patria. En cada paso de este mar de pueblo que inundó las calles yaguajayenses estuvo la eterna firmeza de que alcanzaremos la victoria y que, entre todos, se construirá una Cuba mejor.
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