El río Sena es el gran protagonista de la inauguración. Diversas fuentes dan fe de unos 316 000 espectadores en las orillas del río parisino, unas 104 000 entradas vendidas para los asientos más privilegiados, mientras 212 000 personas se ubicaban en la parte alta de las gradas, de acceso gratuito.
Bajo la amenaza de una lluvia intermitente, Grecia y el equipo olímpico de refugiados fueron los primeros en desfilar, dando paso al resto de delegaciones, que navegaron por el Sena saludando al público presente en las gradas.
La delegación cubana, encabezada por el doble monarca olímpico Julio César la Cruz y la judoca Idalys Ortiz, hizo gala de su espíritu deportivo y su compromiso con el movimiento olímpico.
Varios reportes dan cuenta de que momentos antes de subirse a la barcaza compartida con otras delegaciones, hubo un silencio ensordecedor y la bandera de la estrella solitaria fue el centro de atención.
Los cubanos al frente de la barcaza, pasaron justo en el momento más fuerte de la lluvia pero siempre con la frente en alto y el espíritu de triunfo, tal y como espera su pueblo a partir de hoy.
Francia cerró el desfile de delegaciones como país anfitrión, con un equipo de más de 500 deportistas. Zinedine Zidane ha formado parte del acto de apertura, al aparecer en el vídeo de presentación, portando la antorcha olímpica. También Lady Gaga formó parte del bello espectáculo con una exhibición musical.
La inauguración es la primera en la historia que se lleva a cabo fuera de un estadio. Este viernes también ha quedado marcado por el ataque a tres de los grandes ejes de la alta velocidad ferroviaria en Francia, a pocas horas de abrir la ceremonia.
Cerca de 10 500 atletas de más de 200 Comités Olímpicos Nacionales y el Equipo Olímpico de Refugiados del COI participarán en los 329 eventos de estos Juegos Olímpicos, que se prolongarán hasta el 11 de agosto.
(Con información de Cubadebate, Prensa Latina y El País)
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