Correos Cabaiguán aún respira

Las estrecheces financieras, de recursos y el éxodo de la fuerza laboral pesan sobre Correos Cabaiguán, entidad que sobrelleva la actual crisis e intenta imponerse a las dificultades.

Según Juan Carlos Pérez Ferrer, director de la Unidad Empresarial de Base (UEB), por esta fecha en 2023 registraron cerca de 500 envíos distribuidos, fruto del encadenamiento con las tiendas virtuales Tuambia y Katapulk.

Mas, el servicio de entrega de las compras realizadas desde el exterior, que en su momento posibilitó márgenes de ganancias, ya es historia. 

“Nos golpea la competencia de mipymes dedicadas a esa actividad; sin obviar que afrontamos limitaciones con el combustible y los medios automotores para repartir la paquetería a domicilio”, argumentó.

Resentidos los ingresos de la entidad, el cumplimiento de los planes dista de los indicadores superados en calendarios precedentes. Mantener la estabilidad en ciertas actividades permite revertir parte de las pérdidas.

“Las asistencias tradicionales, telegramas, giros postales, distribución de la prensa al crecer en suscriptores, la entrega de bultos nacionales y el incremento de los pagos a pensionados y jubilados de la Seguridad Social contribuyen a la recaudación”, apuntó el directivo.  

El déficit de personal se ha generalizado en la mayoría de las dependencias de Correos de Cuba por la baja remuneración salarial y como consecuencia de ello, 25 trabajadores en el municipio han debido asumir diferentes responsabilidades dentro de la rama e, incluso, algunos asumen más de un encargo, lo cual atenta contra la productividad.

Las extensas colas describen esa realidad y para garantizar las operaciones disponen de un insuficiente y deprimido parque de vehículos.

“Solo contamos con un triciclo de combustión para cubrir la totalidad de las demandas, al caducar la vida útil de la batería del medio de transporte eléctrico que tiempo atrás apoyó las labores en la UEB”, dijo Pérez Ferrer.

En cuanto a la bancarización, el sector, uno de los pioneros del proceso en la provincia, arrastra dificultades al carecer del fondo de efectivo necesario para ofrecer el servicio de Caja Extra y con un inventario de mercancías pobre y poco atractivo, disminuyen los pagos a través de las plataformas electrónicas.

Con semejante panorama, Correos en Cabaiguán, que al menos presume de mantener a raya las ilegalidades, no cree en milagros para recuperarse. A pesar de las circunstancias, insiste en contar con la gratitud de los clientes.