España llora este jueves la muerte de 140 personas con temores fundados de que la cifra pudiera elevarse significativamente, tras el impacto de la DANA, que todavía sigue vigente.
La Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) dejó un saldo parcial de 118 personas fallecidas en la Comunidad de Valencia y el resto en las regiones de Castilla-La Mancha y Andalucía, aunque el panorama se mantiene tenso por más lluvias en otras zonas.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una visita este jueves al Centro de Coordinación Operativo Integrado de la Comunitat Valenciana, reafirmó el firme compromiso de su administración con los afectados por la DANA.
Reiteró que el Ejecutivo pondrá todos los recursos necesarios para combatir sus consecuencias de las precipitaciones, que rebasaron los 500 litros por metro cuadrado en algunas de las áreas damnificadas.
En todo caso, remarcó que la máxima prioridad del Gobierno ahora es la continuación de la búsqueda de las personas aún desaparecidas.
“No vamos a dejar solos a los valencianos. Vamos a estar ahí el tiempo que haga falta y con todos los recursos y medios posibles”, apostilló.
Acompañado por la ministra de Ciencia, Diana Morant, y el president de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ratificó que el próximo martes se aprobará la declaración de zona altamente afectada por fenómeno natural, con el objetivo de canalizar las ayudas del Estado.
El dictamen que se dará en el Consejo de Ministros permitirá agilizar las asistencias destinadas a reconstruir las zonas afectadas y recuperar la normalidad cuanto antes.
Sánchez ponderó la solidaridad del Gobierno con todas las víctimas de la tragedia y valoró el compromiso de la Unión Europea, que también movilizará recursos en respuesta a la catástrofe.
Mil 116 agentes de la Unidad Militar de Emergencias (UME) del Gobierno permanecen en las zonas afectadas, a los que se suman 200 efectivos del Ejército de Tierra, mil 800 de la Policía Nacional y 750 de la Guardia Civil, además de 334 vehículos, aviones y helicópteros.
No obstante, se repiten escenas dantescas en las que además de puentes arrasados por las aguas, vehículos amontonados de disímiles formas en carreteras y calles, hay más de 80 kilómetros de vías destrozadas o severamente dañadas.
El ministro de Transportes, Oscar Puente, reconoció que la recuperación de los trenes hacia Valencia demorará unos 15 días, y la reparación de las autopistas varios meses.
Expertos consultados por Radio Televisión Española calculan que la recuperación costará al país ibérico cerca de cinco mil millones de euros, mientras Francia ofrece una brigada de 250 bomberos y la Unión Europea se apresta a desbloquear fondos de inmediato.
Necesitaremos varios años en volver a la verdadera normalidad; la naturaleza nos siga enviando señales inequívocas, el cambio climático es una realidad incuestionable, afirmó Emiliano Page, presidente de Castilla-La Mancha.
Castellón, una provincia del noroeste de Valencia, está bajo el azote de intensas lluvias en estos momentos y grandes inundaciones.
Para los expertos, la intensidad de las lluvias se asoció con el mar Mediterráneo como si fuese un bombeo adicional de combustible, a lo que se sumaron pequeños tornados, algo sin precedentes en España.
El rey Felipe VI, reunido este jueves en Madrid con alcaldes de Iberoamérica, volvió a enviar muestras de solidaridad y el ofrecimiento de respaldo por parte de la Casa Real.
Las autoridades continúan el proceso de levantamiento e identificación de las víctimas y específicamente el Instituto de Medicina Legal de Valencia activó nueve equipos forenses para que se desplacen a los lugares afectados por la DANA.
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