Tras casi una semana de debates científicos y académicos por un lado, y de presentaciones de bienes y servicios y concertación de convenios por el otro, llegan a su fin la Convención Cubaindustria 2024, efectuada en el Palacio de Convenciones de La Habana, y su Feria Expositiva Internacional, con sede en Pabexpo.
En la apertura de esta última, y en presencia del presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez y del primer ministro Manuel Marrero Cruz, Ernesto Cedeño Cruz, viceministro de Industrias, calificó esa cita comercial como una oportunidad para identificar y fortalecer alianzas estratégicas con proveedores y clientes.
En ella se podrán concretar, dijo entonces, proyectos de negocios sustentables, que permitan un mejor aprovechamiento de las capacidades instaladas disponibles, en aras de lograr incrementar la producción nacional en función de las necesidades de los sectores estratégicos, la sustitución de importaciones y las exportaciones.
En la feria estuvieron representados los grupos empresariales de la industria ligera, metalmecánica, siderúrgica, electrónica, química y del reciclaje, la Unión de Industrias Militares, 11 empresas de la Zona Especial de Desarrollo Mariel, entidades locales, el Fondo de Bienes Culturales y formas de gestión no estatal, que complementan el entramado económico e industrial del país.
Pero no sólo para los 520 expositores nacionales y extranjeros, que acogió el recinto ferial, estas jornadas fueron intensas y de aprendizaje mutuo, sino también para quienes en la convención las conferencias magistrales y técnicas, talleres, paneles y presentaciones de trabajos y poster, del 17 al 21 de junio convirtieron a La Habana en epicentro de saberes y experiencias, provenientes de una veintena de naciones.
1O CONGRESOS FORMARON PARTE DE LA CONVENCIÓN
Más de 300 ponencias y unas 60 conferencias magistrales integraron el programa científico y académico de 10 congresos dedicados a temáticas como el reciclaje, la metalurgia, la sideromecánica, los envases y embalajes, la gestión de la calidad y protección ambiental, la electrónica y la automática, la moda, el mueble, la climatización y la refrigeración.
En todos se expusieron retos, dificultades y soluciones por expertos, tecnólogos, investigadores, docentes y estudiantes universitarios sobre las problemáticas fundamentales que limitan el avance de la industria cubana, y repercuten en la satisfacción de las demandas de los consumidores.
Por ejemplo, el Doctor en Ciencias Agustín Lage disertó acerca de la industria 4.0 y las empresas estatales en Cuba; el Doctor en Ciencias Armando Rodríguez, viceministro del CITMA, habló de la innovación en la industria, y la Doctora Nancy Fernández, directora de la Oficina Nacional de Normalización, se refirió a los beneficios de las normas para la economía.
Indistintamente, en sus respectivos encuentros, salieron a relucir las cadenas de valor de renglones como el acero, el papel-cartón y el plástico, y en particular en el XVI Congreso Internacional del Reciclaje se discutió respecto a la estrategia de desarrollo del país y la necesidad de incentivar en la población la cultura del reciclaje.
Trascendió que Cuba genera alrededor de 12 900 toneladas diarias de residuos sólidos, situación que se complejiza en los polos turísticos, por la cantidad de servicios que generan y la población flotante, que muchas veces supera a la del propio hotel o instalación extra hotelera.
En ese evento el fortalecimiento de la empresa estatal fue el tema central de un panel, en el que los especialistas trataron asuntos como el control interno, la superación de los cuadros y reservas, el proceso inversionista y el sistema de pago.
Un taller denominado «La pasta dental, un desafío de la industria cosmética», permitió conocer la participación de un grupo de entidades y universidades en el desarrollo de nuevas formulaciones, destinadas a sustituir 11 materias primas para elaborar en la unidad empresarial de base Suchel Fragancia un producto de calidad acorde con las normas cubanas.
Mejoras de la cadena de frío para la comercialización y distribución de los productos frescos y congelados en el sistema comercial, algunos renglones exportables que desde la universidad sustituyen importaciones, las baterías de los equipos eléctricos, la transición energética en Cuba: situación actual y perspectivas, y el impacto económico del diseño, fueron también temas de conferencias, paneles o talleres.
Desde una mirada aguda y en consonancia con la Política de Desarrollo Industrial del país en Cubaindustria se escucharon soluciones para enfrentar las carencias de recursos financieros, energéticos, de piezas de repuesto, materias primas y tecnologías, y reactivar o reanimar fábricas y talleres en bien de la economía y la sociedad.
Mucha futurología y pocos o ningún resultado.