¿Qué hago sin un muslo de pollo ni para un remedio? Apocalíptica frente al congelador, Marisela es la viva estampa de los cabaiguanenses que viven al día. Agotó hasta la reserva que destinaría para una sopa en caso de enfermedad.
Después de rastrear varios establecimientos pertenecientes a mipymes y trabajadores por cuenta propia, no encontró ni sombra del mencionado cárnico. Apenas aterrizó la Resolución 225 de 2024, emitida por el Ministerio de Finanzas y Precios y que establece tarifas minoristas máximas para seis renglones de alta demanda, el pollo, incluido en esa lista, anda jíbaro en ciertos puntos de venta.
El aceite, excepto el de oliva, las pastas alimenticias, las salchichas, la leche y el detergente en polvo completan los surtidos contemplados en la regulación que situó un tope a los precios serruchadores de bolsillos en un contexto inflacionario donde unos pocos engordan sus ganancias con las necesidades de muchos.
La realidad persistirá mientras decrezcan las producciones y mermen las ofertas de bienes y servicios, acaso dos de un extenso inventario de desafíos que el país carga a cuestas para corregir distorsiones y reimpulsar la economía.
La decisión de algunos actores económicos privados, con quienes se dialogó previo a la entrada en vigor de la norma, va en contra de lo estipulado. Lo demuestran las 38 multas impuestas desde el viernes 12 de julio a la fecha en Cabaiguán, con un un valor superior a los 113 000 pesos.
El equipo de supervisores, Decreto Ley 30 en mano, acorrala las violaciones. Aun así, prevalecen titulares que burlan los límites fijados, tarifas todavía altas e inalcanzables a la capacidad adquisitiva de gran parte de la población. Lo hacen porque alegan que los precios concertados les generarán pérdidas.
¿Dominan estos propietarios de negocios la Resolución 225? Alega lo dictado, entre otras cuestiones, que para abaratarles los costos quedan exentos de liquidar los aranceles en la Aduana por importar los productos y se benefician con un margen de ganancia de hasta un 30 por ciento.
Interpretaciones erróneas dejan como saldo quebrantamientos. A río revuelto, ganancia para los infractores. Según registros de la Dirección Integral de Inspección en el municipio, constan tres expendios forzosos de pollo y salchicha ocultos a los usuarios, por citar algunos ejemplos.
¿Cuántos retiros temporales del proyecto de trabajo consignan en los controles conjuntos realizados? ¿Se contabilizaron decomisos a quienes ejercían de forma ilegal? Por el momento, esas acciones no acumulan estadísticas para el territorio.
De un apercibimiento a otro se escabulle la alimentación de los cabaiguanenses, mientras las tiendas en Moneda Libremente Convertible también muestran tarifas elevadas.
En ese sentido, Miskel Acosta Paredes, director de Finanzas y Precios en la provincia, declaró recientemente a Escambray que “los nuevos actores económicos logran importar el pollo del mercado donde más barato se está vendiendo hoy y a las tiendas del Estado no se les permite importar de las productoras norteamericanas”. Aquí quedan esclarecidas las restricciones, resultado del cerco económico impuesto por la administración estadounidense a la isla.
Por el momento, Cuba permanece en busca de soluciones. A juicio de Vladimir Regueiro Ale, titular del Ministerio de Finanzas y Precios, “las tarifas no serán estáticas y responden a un estudio de los costos de importación y de otros factores logísticos”.
Tampoco las contravenciones empleadas a modo de cura de caballo resolverán las carencias, pero intentan domar a los transgresores. Podrán habilitarse canales telefónicos a nivel gubernamental para comunicar las violaciones a la vista de todos. En otros momentos los mismos dígitos han permanecido disponibles y en las tarimas no estatales igual ardieron los precios, que proliferan como la mala hierba.
Recitar estas tarifas ejercita la memoria de los consumidores. Ojalá cause el mismo efecto del lado de allá del mostrador y con un valor añadido: cumplirlas al pie de la letra. Menos contemplaciones y que prenda la sistematicidad en los mecanismos fiscalizadores, extendidos también a centros estatales, unidades básicas y entidades comerciales, favorecerá cerrarles el paso a los precios sin control.
Una versión diferente tendría la historia de Marisela y de quienes, como ella, se preguntan cómo asegurar la sopa ante la ausencia de pollo.
Cada vez que veo que comparan al estado con las mypimes y cuenta propista , en asuntos de precios , me preguntó , como pueden , las mypimes y cuenta propista trabajan para si , pagan su impuesto , sacan los gastos y…..aguarachar y el estado ? Tiene que pensar como mantener los logros alcanzados ,salud , educación, investigación , cultura – deportivo, etc de los cuales tambiwn se benefician los mymiperos y contrapropista, y lo mas duro a los privados nadie los persigue ni pone traba , peeo a los del estado si.Y no dejo decir que hay directivos ineficiente, lentos para el proceso, como que los que estan son morosos en cumplir con lo que está establecido
Hay que confiscar todos los negocios privados y socializar la producción.
Fácil, le compramos el pollo a los nuevos actores económicos y los vendemos en los mercaditos.
Las multas no resuelven nada:decomiso,cierre del negocio y confiscación de bienes y mercancias.¡Verán cómo se acotejan!
Se necesita que la puesta en práctica de la ley no decaiga en el tiempo. Podrán?.
Hay que mandar para primer año de Economía a todos los decisores que piensan que con regulación de precios estabilizan una hiperinflacion, el resultado es la desaparición de productos en el mercado.