El Gobierno de Panamá informó este miércoles que cerraron entre cuatro y cinco trochas en la selva de Darién para frenar la migración irregular rumbo a Estados Unidos.
De acuerdo con el comunicado del Ministerio de Seguridad (Minseg), el objetivo de la medida es encauzar el flujo por “un paso humanitario” y así “proteger” más fácilmente a los caminantes que transitan por la jungla fronteriza con Colombia.
El titular del Minseg Frank Ábrego indicó a medios de prensa que se cerraron entre cuatro y cinco pasos por donde ingresaban migrantes irregulares al istmo, conducidos por coyotes desde el vecino país.
La semana pasada, el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) anunció el cierre de unos tres pasos para perfeccionar los controles y abrió un llamado corredor humanitario en la ruta de Acandí o Capurganá -Bajo Chiquito- Estación Transitoria de Lajas Blancas y de ahí hacia Neily, en Costa Rica, donde llegan en ómnibus desde la estación transitoria.
Con esta medida se busca concentrar la labor de las patrullas del Senafront para que “mantengan la seguridad y combatan efectivamente a las personas (que) tratan de cometer delitos contra los migrantes”, señaló.
Ábrego indicó también que “más que cerrar la frontera, el propósito es disminuir la cantidad de migrantes que transitan irregularmente por la selva de Darién”, entre mil y mil 300 diarios antes de que el nuevo Ejecutivo panameño asumiera su mandato el pasado 1 de julio y tomara estas medidas.
De acuerdo con la nota oficial, muchos viajeros ilegales no portan documentos de identidad, por lo que tuvieron que recurrir a métodos alternativos como sus huellas dactilares para registrar unas tres mil personas vinculadas a distintos delitos y 18 asociadas al terrorismo, que no fueron identificadas por las autoridades colombianas a su paso por el país suramericano.
El funcionario agregó que notificaron a Bogotá sobre la implementación de una ruta segura para el paso de migrantes, con el objetivo de protegerlos de cualquier tipo de agresión, al tiempo que aclaró que no existe en la zona limítrofe un puesto de control binacional.
Acerca de un acuerdo suscrito con Estados Unidos para apoyar el transporte aéreo de extranjeros, el funcionario adelantó que en los próximos días se coordinará con países vecinos la repatriación de migrantes irregulares.
Informes del Servicio Nacional de Migración dan cuenta que hasta el 28 de junio pasado transitaron por la selva de Darién 197 mil 389 personas -en su mayoría venezolanos, ecuatorianos y haitianos-, de ellas 27 mil 375 solo en el sexto mes del año y cinco mil 628 son menores de edad.
El año pasado cruzaron la jungla, a pesar de los peligros naturales que ponen en riesgo la vida y el acoso de grupos criminales, más de 520 mil viajeros ilegales, un 20 por ciento infantes.
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