El primer ministro de Cuba, Manuel Marrero Cruz, hizo llegar esta semana una misiva a la Oficina del Conservador de la Ciudad de Trinidad y el Valle de los Ingenios (OCC) como reconocimiento a su prolífica labor durante las jornadas que antecedieron al aniversario 510 de la fundación de la villa y el gran cúmulo de obras que esta institución realiza de cara al porvenir.
La postal fungió como epílogo a la alabanza que realizó públicamente el mandatario durante la Asamblea Solemne que acaeció en la tercera villa el pasado domingo y a la cual asistió una representación de la máxima dirección del gobierno y el partido cubanos.
“Me gustaría mencionar especialmente a la OCC por su encomiable labor en la protección del patrimonio de Trinidad y por las tareas de embellecimiento realizadas”, comunicó Marrero Cruz en el acto.
A lo largo del último año, esta institución se ha vinculado a más de 61 objetos de obras entre los que resaltan la reparación de aceras y empedrados, y la reanimación de fachadas en varias calles de la ciudad entre las que destacan el centro histórico, Independencia, Boca, Amargura, Santa Ana, Jesús María y Gutiérrez.
“Se pintó la torre del convento, los museos de Arquitectura y Romántico, el parque de la Plaza Mayor, se consolidaron cubiertas de viviendas, nos adentramos en la segunda etapa del proyecto de colaboración de la calle Independencia, que constará de un parque y una caballeriza; erigimos la valla de la entrada de la ciudad e inauguramos nuestra obra capital y nueva sede: Casa Frías”, comentó la directora técnica de la oficina, Yamilka Álvarez Martínez.
Esta misiva, en palabras del Conservador de la Ciudad, Radelex Cartaya Matamoros, constituye un premio al esfuerzo que durante un cuarto de siglo realiza la institución que actualmente dirige para preservar para estas y las siguientes generaciones aquella que la doctora Alicia García Santana denominó una villa única, un don del cielo.
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