Como en casi todos los sectores de la economía, la producción y los servicios de Sancti Spíritus, en las unidades vinculadas al sector de la Industria Alimentaria el ritmo de trabajo se incrementa por estos días para recibir en mejores condiciones laborales el nuevo advenimiento de la efeméride del Moncada.
Según declaró a Escambray, Víctor Díaz Acosta, director de la Empresa Provincial del sector, amplio resulta el movimiento reconstructivo que enfrentan desde cada uno de los territorios para que las unidades subordinadas a esta rama reciban el 26 de Julio con una mejor imagen.
“Estamos trabajando intensamente en el resane de paredes y pisos, arreglo de cubiertas, luminarias, electricidad y pintura, así como la limpieza y embellecimiento, entre otras acciones, que tienen lugar en nuestros centros, a los cuales los distingue no solo la buena presencia exterior del establecimiento, sino la estabilidad y calidad en las elaboraciones”.
Igualmente, aclaró que a punto de finalizar sus acciones está la panadería-dulcería de la localidad de Sopimpa, un centro enclavado en el Plan Turquino, así como otras labores desarrolladas en la panadería El Tigre del municipio de Fomento. Mientras que, en la recta final está, también, la dulcería El Nery, de la ciudad cabecera provincial, un centro insigne del sector, el que, de conjunto con la construcción de la nueva empresa, constituyen dos de las acciones constructivas más importantes de la Industria Alimentaria.
Desde otros municipios como Yaguajay, Jatibonico y La Sierpe, se reportan trabajos de remodelación para mejorar las condiciones laborales y asegurar una mayor calidad del servicio a la población, aunque el propio Díaz Acosta insistió que el movimiento en saludo al 26 de Julio incluye todos los territorios y nadie se quedará rezagado.
En cuanto al tema de las producciones, el propio director aclaró que sus unidades trabajan para asegurar un módulo que se conforma para los niños y niñas que cumplen 15 años, el cual incluye un cake, pan para bocaditos y un paquete de galletas o palitroques, principalmente. Igualmente, dijo que asumen la elaboración de otros surtidos como la galleta de sal, en paquete de 500 gramos para los casos en situaciones de vulnerabilidad, así como una bolsa de este mismo producto para las embarazadas y los diagnosticados con bajo peso, surtidos que recibirán a través de la bodega del comercio.
Por último, Díaz Acosta, aseguró que sus unidades productoras se enfrascan en garantizar un nivel de alimentos destinados a la venta liberada, entre ellos: pan, palitroques, galletones, bases para pizzas, dulces y bolsas de galletas, entre otros, que se ofertan en las ferias y en los puntos de venta del sector.
Bueno y la panadería de narcisa??? Por donde corre una Zanja con aguas albañales,pululan los ratones y cucarachas, y ni hablar de ka calidad del pan, el ultimo era negro, yo aqui lo he dicho mas deuna vez y no pasa nada. Ojala alguien aquí kea este comentario, si lo publican, puedan resolver algo que al parecer nadie va a solucionar.