La impronta del joven Rubén Martínez Villena, más allá de frías acciones o datos estadísticos, instó el debate inicial del programa teórico de la XXVI edición del Coloquio Voces de la República.
Como sucede en cada mes de mayo, la cita reúne en Sancti Spíritus a investigadores, periodistas e historiadores de diferentes territorios de la geografía nacional que, agrupados en paneles sobre diferentes temáticas, auscultan un período de la historia del país que suele comprenderse desde una visión un tanto estereotipada, a partir de análisis superficiales.
En cambio, durante 1902-1958 figuras como Rubén Martínez Villena obligan a indagar en las múltiples realidades que coexistieron en la Cuba republicana.
“Él se ha convertido en uno de los exponentes más importantes del proceso revolucionario cubano desde la década del 20 hasta 1934, cuando fallece de tuberculosis —refirió el profesor universitario, procedente de Santiago de Cuba, Abel Elieser Cuevas, quien compartió su estudio Rubén Martínez Villena, una aproximación desde las páginas de la revista Bohemia—. Me ha permitido profundizar en su vertiente poética, lo que ha sido un verdadero goce como investigador”.
En esta primera jornada el Coloquio, uno de los pocos eventos del país que concentra sus análisis en la República, también presentó propuestas sobre expresiones discriminatorias, economía, política y educación.
Para este 16 de mayo se reserva, como ya es habitual en el encuentro, el panel de clausura: La recepción martiana en la República, esta vez a cargo de tres Doctores en Ciencias: Luis Toledo Sande, Maximiliano Trujillo y Félix Julio Alfonso.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.