A Mariela Garachipe, vecina del sexto piso en el edificio espirituano 12 Plantas, aquel movimiento inusitado de los calderos en su cocina le pareció obra de la imaginación.
Pero muy pronto oyó la algarabía de los vecinos y comprobó que no estaba loca: muchos habían sentido aquel mismo temblor y corrían despavoridos escaleras abajo.
Las historias se sucedieron de boca en boca. A la pecera de Yamilka se le botó el agua; la cama de Yanela se balanceaba como una hamaca y la servicial Estela no lo pensó dos veces para bajar corriendo. No es la primera vez que su casa se estremece en el piso 10.
Hasta la madre recién parida corrió con su niño en brazos, ante el temor de una nueva sacudida, porque la naturaleza, ya se sabe, a veces no avisa.
Nuria Camellón dice que en su apartamento nadie lo percibió demasiado, pero ella sí lo vivió en cuerpo y alma y luego quedó totalmente mareada.
Yoanna Herrera y Dayana Marrero confiesan que le achacaron el temblor a sus nervios antes de que la noticia se multiplicara y se diera por hecho que en el centro también la tierra se movía.
Se trata, al parecer, de la percepción del impacto de los temblores de tierra reportados esta mañana en la zona oriental de Cuba, a unos 48 kilómetros al sur de la localidad de Pilón, en Granma.
A ciencias ciertas, nadie tiene ahora mismo una confirmación científica en Sancti Spíritus. Pero otros vecinos de Los Olivos, Jatibonico y la comunidad costera de Tunas de Zaza también han dado fe de ese suceso que les cortó la respiración.
A mí, ni me pregunten. Apenas puedo escribir con este mareo de borrachera fruto del temblor que hizo correr a los vecinos del 12 Plantas escaleras abajo, sin pensar en la llovizna que caía suavemente sobre los alrededores de los bajos donde, al menos, se sabían a salvo de la amenaza.
Sentir o no sentir el sismo en Sancti Spíritus ya no debe ser el centro del debate público, hay una realidad muy palpable, que es prioridad. Centrarnos en nuestra hermana provincia de Granma. Hasta allí debemos una vez más, concentrar nuestra atención. Solidaridad y compasión por los Granmenses afectados. Que siga la marcha por la Revolución!!!
Vivo en jatibonico y no senti nada y ise varias preguntas a demasiada gente y tampoco sintieron nada
Bueno yo no sentí nada, y estuve en Haití cuando sucedió allí. Las personas a li mejor están sujestivas x la noticia.
Pues bien, yo estaba sentada en el balance escribiendo por el celular en ese horario y sentí como q se tambaleó algo leve , por un momento pensé q había sido mi perrito q estaba debajo pero mire y no había nada ,luego en el noticiero veo la noticia del sismo y coincidió con la hora en q estaba sentada , fue leve, vivo en la calle maceo
2 ciclones y un sismo…Es como si la naturaleza quisiera constribuir a estremecer..🤔