Sancti Spíritus: Trabajadores del central Uruguay apoyan la zafra en Tuinucú

Cuando se quiera tomar el pulso exacto a lo que representa la inserción de trabajadores del central Uruguay, primero, en las reparaciones del ingenio Melanio Hernández y, ahora en la zafra azucarera, basta con repasar el área de molinos, justo el punto más crítico de la operación industrial durante las últimas contiendas, donde ocurrían reiteradas roturas e interrupciones.

Por eso Radamés Rodríguez Palmero (Nacho), al frente de la fábrica de Tuinucú, esgrime a Escambray un primer elemento que expresa por sí solo el aporte de esos hombres llegados del Uruguay, tan fusionados hoy a la plantilla del Melanio Hernández que hasta cuesta trabajo identificarlos: “De los tres turnos del central para la zafra, en uno es clave la fuerza de aquel ingenio”.

Resalta que acometieron importantes trabajos de reparaciones en el Melanio Hernández con la intervención de mecánicos del Uruguay; también destaca el desempeño de otras fuerzas de Jatibonico asignadas a las labores del mantenimiento diario en el ingenio de Tuinucú.

“Nos ha servido de mucho esta fuerza calificada, porque tenemos déficit en nuestra plantilla, por eso el refuerzo del Uruguay ha sido una inyección para realizar la zafra. Aquí el área crítica era la del molino debido a la fluctuación laboral que tuvimos, pero con la llegada de operarios de Jatibonico fue que logramos hacer la gran reparación al tándem y hoy trabaja con la eficiencia que hacía rato no teníamos”, señaló Rodríguez Palmero.

Aún parado desde hace dos zafras, el Uruguay tiene en el capital humano un recurso tan valioso que, tanto en la anterior contienda como en la actual, su personal se ha vuelto útil para acometer trabajos de reparaciones e intervenir en la operación industrial de otros ingenios; tal fue el caso el pasado año del central Antonio Guiteras, de Las Tunas.

Vladimir Gómez Morales, director del Uruguay, precisó a Escambray que, junto al apoyo que brindan al ingenio de Tuinucú, trabajadores de Jatibonico están insertados actualmente en la zafra de los centrales Mario Muñoz y Jesús Rabí, ambos en Matanzas; en tanto tienen otras dotaciones de operarios preparadas para responder a nuevas solicitudes de fuerza calificada.

“Nos hemos lanzado a fabricar y recuperar piezas, a realizar reparaciones y mantenimientos en otras industrias azucareras del país; además de la contribución enorme del taller de maquinado a varios centrales para la búsqueda de soluciones a problemas tecnológicos”, destacó Gómez Morales.