Fue en el 2007 cuando dijo adiós a sazones, calderos, el calor del fogón y los condimentos que utilizaba en aquella granja cafetalera en las alturas de Topes de Collantes, un oficio, primero improvisado y que después se le adentró en la sangre cual vitamina para sentirse realizado, tal como se consideró en la escuela especial Efraín Alfonso, o tras alcanzar la especialización en el arte culinario con tres títulos que otorga la Asociación Culinaria.
Entre cocinas transcurrían los días de Alexis Cáceres Ocaña hasta que los vecinos del barrio Kilo-12 lo sorprendieron con una propuesta que no pudo rechazar: era uno de los nominados como candidato a delegado del Poder Popular por la circunscripción 111 en el municipio de Sancti Spíritus.
Y ahí vino lo fuerte, porque no todo el mundo tiene la facilidad de enfrentarse a tantas personas y tuvieron que pasar unos cuantos mandatos para saber llevar sabiamente sobre sus hombros la carga de insatisfacciones y compromisos asumidos con la responsabilidad que le dieron los casi 1 700 electores de su zona.
Hace unos cinco años ese universo de cuadras y vecinos se amplió enormemente, cuando asumió las riendas del Consejo Popular Kilo-12, uno de los barrios más populosos de la ciudad.
“Es un Consejo Popular muy grande y disperso, así que es difícil estar en varios lugares el mismo día porque desde la Línea hasta La Trinchera, el río Tuinucú por la Autopista, La Aurora, el Camino de Fidel, Garaita y hasta una parte colindante con Los Olivos son tramos largos, de más de 50 kilómetros cuadrados, con unos 18 000 habitantes. Tiene en su radio de acción las principales industrias de la provincia e importantes instituciones educacionales.
Estos últimos años han sido muy difíciles, sobre todo los que estuvieron marcados por la covid, donde intentamos nunca perder ese vínculo con el pueblo, de modo que en ese tiempo los delegados con los propios electores y las empresas cercanas se movilizaron unidos para cuidar y atender las áreas en cuarentena, repartir alimentos y proteger a las familias más vulnerables”.
Mantener el Kilo-12 alejado de manifestaciones de marginalidad, a partir de la solución a las necesidades e intereses de quienes allí viven, forma parte del quehacer de los 12 delegados que integran ese Consejo Popular.
“A pesar de no estar entre las comunidades y barrios que han tenido una reanimación total, y de que faltan más atención, ofertas y servicios, se han hecho cosas trascendentales en lugares como Santa Cruz, donde se repararon la farmacia, el consultorio, la bodega y de alguna manera se aseguró el abasto de agua al lugar desde la fábrica de asfalto; se han construido parques, jardines y aceras y se han podido, poco a poco, encontrar algunas soluciones a partir de proyectos como el de Soberanía Alimentaria y Nutricional (SAN) que involucra a niños en las parcelas en escuelas, a la población en el cultivo en patios, además de la creación de una placita en la vivienda de uno de esos productores.
Sin desechar los esfuerzos y las conocidas limitaciones, en la agenda de Alexis quedan puntos pintados en rojo y cosas pendientes: los problemas de alcantarillado en la circunscripción 111, lo cual hace que las casas se inunden cuando llueve, un planteamiento con casi tres décadas. A ello se suman problemas de vivienda en lugares como La Trinchera, Calle Segunda Final, Alicante, Santa Cruz y Chambelón, así como una preocupante situación con el abasto de agua en La Trinchera y en otros sitios muy puntuales, junto a salideros en la mayor parte del Consejo Popular.
Sabe que el proceso de rendición de cuenta que se avecina, el primero tras la epidemia de la covid, será una escuela y un reto; por eso también pone en una balanza logros como la atención a madres con más de tres hijos por parte de la UEB Las Delicias La Rotonda, que asegura alimentos con precios accesibles a esas familias y a las gestantes, así como la ranfla con un desvío que se construyó en la circunscripción 77, un lugar a donde iban a parar los residuos de toda la zona cuando llovía, además de la reparación de locales de Comercio, entre otras acciones que eran planteamientos incluidos en el plan de la economía.
“Para las rendiciones de cuenta hemos tenido una excelente preparación, en la que han participado los principales directivos de la provincia, quienes han desglosado la situación económica, política y social del territorio y temas muy actuales como el proceso de bancarización, entre otros. Sabemos que hay muchas limitaciones, pero son tiempos de unir fuerzas, y esos encuentros pueden ser un espacio para dialogar y buscar soluciones a los problemas que sin muchos recursos se puedan resolver en el barrio”.
Felicidades por el buen trabajo que realiza ese delegado,ojalá todos fueran como él.invito a la periodista hacer un trabajo sobre la calle Juan glez entre Luis Ramírez y Ramón López Peña del municipio Sancti Spiritus. Da pena adentrarse a esa calle,tal parece que uno llegó a una favela brasileña. Con la situación epidemiológica que tiene el país y nuestra provincia específicamente no se cómo no se han enfermado mucho más vecinos del edificio 26 que llevan casi 7 años sufriendo las picaduras de mosquitos que se generan de dos grandes salideros de agua potable que corren edificio abajo. Todo el mundo lo ve y nadie hace nada.Me pregunto dónde está el delegado de la zona?