Urgencias de la recreación (+fotos)

La adolescencia es una etapa de la vida en la cual resulta fundamental la complicidad de diversos actores sociales con el humilde propósito de formar adultos de bien. Si observamos las demandas prioritarias de este grupo etario, siempre la recreación obtiene un papel protagónico.

¿Qué hacer durante el tiempo libre? ¿Cómo saber cuál es la mejor opción para recrearse? ¿Qué reclaman los adolescentes espirituanos actualmente?

Al indagar con muchachos tanto de Secundaria como de Preuniversitario persiste la falsa idea de que recreación es igual a consumo de bebidas alcohólicas, estancia hasta altas horas de noche en espacios públicos y, en muchos casos, el consumo de cigarros o los llamados vapes, más conocidos como cigarrillos electrónicos.

Para entrar en contexto, es importante destacar que los adolescentes aún no alcanzan la mayoría de edad y, por tanto, sus espacios para el ocio deben ser sanos y educativos. Durante esta etapa se definen muchos valores y conductas sociales que deben estar encaminados al bienestar físico y mental, así como a la superación.

María Eugenia Gómez Pérez, subdirectora provincial de Cultura, apunta una preocupación importante: la idea compartida de que los espacios promovidos por las Casas de la Cultura deben incluir, necesariamente, un equipo de audio y cualquier música mecánica, pues esas propuestas forman parte de los gustos de los jóvenes y adolescentes hoy día.

Sin embargo, precisa que en Sancti Spíritus existen otros espacios culturales mayormente subutilizados, que incluyen las peñas en la Galería de Arte, exposiciones, actividades en museos dentro de la ciudad y programaciones diversas en otras instalaciones de toda la provincia.

Un ejemplo palpable fue recientemente el capítulo espirituano de la Feria Internacional del Libro, que brindó un cronograma variado de opciones recreativas y culturales para todas las edades. Mas, la asistencia sistemática del público adolescente a estas y otras convocatorias sigue constituyendo un reto pendiente.

Sin embargo, en intercambios con grupos de muchachos de la provincia, Escambray pudo constatar un creciente interés de estos menores por discotecas y espacios nocturnos.

Aseguran que acceden sin problema a dichos lugares y allí mismo les facilitan las bebidas. Algo debemos recordar: a los 16 años obtienen el Carné de Identidad, pero hasta los 18 no alcanzan la mayoría de edad. Conviene entonces una reflexión oportuna: ¿Están las familias al tanto de los sitios a donde van sus hijos y qué consumen?

Los estudios internacionales en materia de recreación para adolescentes promueven actividades relacionadas con la actividad física, el hábito de la lectura, la cultura y el arte en todas sus expresiones, la recreación al aire libre y en contacto directo con la naturaleza, el juego en sus diferentes manifestaciones, entre otros.

Por otra parte, Sancti Spíritus posee algunas instalaciones deportivas que facilitan la práctica de distintas disciplinas, tales como la Sala Polivalente y otras donde se desarrollan el programa A jugar y formas sanas de recreación, de acuerdo con la opinión de Alberto Beatón Núñez, subdirector provincial de Deportes. Pero no resultan suficientes ni se promueven adecuadamente entre los jóvenes.

En tal sentido, la propia fuente asegura que actualmente se trabaja en un proyecto inversionista con el fin de recuperar la tan conocida Bolera, donde, además de sus ofertas tradicionales, se podrían incluir otros juegos de mesa que gozan de gran aceptación como el billar.

La recreación de los adolescentes debe constituir una prioridad para todos los sectores y las instituciones implicadas. Sus preocupaciones, necesidades e intereses reclaman atención y comunicación adecuada entre la familia y la sociedad en su conjunto.

Un paso importante parte de conocer y comprender adecuadamente las características de esta nueva generación que se desenvuelve al ritmo de la tecnología, el consumo y otros patrones sociales establecidos en Internet. La tarea es gigantesca: apoyar y atender sus exigencias, sin descuidar la misión de educarlos, es aún una meta pendiente. Y urgente.