Mientras en las vegas espirituanas la siembra de la hoja entra en lo que históricamente se considera como su mes óptimo por ser, junto a diciembre, cuando se logran los mejores rendimientos, la campaña tabacalera 2024-2025 se concentra en resarcir los daños que trajeron las lluvias a los semilleros.
A juicio de Isidro Hernández Toledo, director agrícola de la Empresa de Acopio y Beneficio de Tabaco, “esta se considera una semana decisiva porque tras las precipitaciones de los últimos días que afectaron a todos los territorios donde su cultiva tabaco, se ha presentado un oreo que los productores tratan de aprovechar al máximo”.
Según la fuente, se afectaron unos 2 000 canteros de los 4 000 existentes y hoy ya llega a la provincia la postura necesaria porque “en no pocos casos la lluvia arrastró las que había y no se pudieron aprovechar”.
Las lluvias también obligaron a parar la siembra que ya había iniciado tempranamente el pasado 20 de octubre, pero la misma se retomó y hoy suman unas 35 hectáreas las plantadas en la provincia.
La plantación, según Hernández Toledo, cuenta con la garantía de la mayor parte de los insumos necesarios. “Aun en medio de la compleja situación económica y energética del país, la provincia dispone de un respaldo de recursos mayor que anteriores campañas, incluido el combustible que ha logrado estabilizar su entrada a partir de la garantía que ofrece el grupo Tabacuba a nivel nacional; se están entregando fertilizantes y productos químicos”.
Sin embargo, el reto mayor para los vegueros es poder completar toda el área prevista para una campaña que necesita superar los saldos de la anterior, cuando se logró la producción más baja de la historia.
De acuerdo con Isidro Hernández Toledo, se han contratado 1 300 hectáreas —320 de ellas pertenecientes a la tecnología de tapado— y la estrategia es continuar sumando nuevos productores, sobre todo de la modalidad sol en palo a partir de la concreción de mejores incentivos financieros aprobados a nivel nacional.
Por eso la contratación sigue abierta hasta completar o acercarse lo más posible a las 2 260 hectáreas estimadas para la actual contienda.
Cuantas cosas tendremos que recuperar…..para poder vivir como personas normales…los discursos van dispares a la realidad económica de Cuba.