La vivienda resguarda prioridades sociales

A resolver parte de las afectaciones que a lo largo de años han dejado en Sancti Spíritus las afectaciones de eventos meteorológicos y dar solución a casos de personas en situación de vulnerabilidad estarán dirigidas las principales acciones de la vivienda durante el año que recién comienza.

A pesar de que siguen bajos los niveles de ejecución y resulta escaso el avance en acciones de rehabilitación y conservación de inmuebles en los territorios, el pasado año se lograron terminar en la provincia 359 obras nuevas, de ellas 82 por la alternativa de adaptación de locales y 453 por acciones de rehabilitación.

De acuerdo con Néstor Borroto, al frente de la Dirección de Vivienda en el territorio, entre las mayores insatisfacciones figuran la construcción de células básicas habitacionales (subsidios), algunas de ellas con avances nulos ya que de las 90 a concluir sólo se terminaron 14, para un 16 por ciento de cumplimiento.

Sobre las perspectivas para el año en curso el directivo explicó que teniendo en cuenta que la situación de la vivienda es de los asuntos de mayor impacto social, para el 2025 se prevén terminar 133 nuevos inmuebles por la vía estatal, un compromiso que es pequeño dada las condiciones de escasez de recursos, fundamentalmente cemento y acero.

El plan, señaló, comprende, además, la edificación de 95 células básicas y 222 viviendas por esfuerzo propio, acciones que se concentran en los municipios de Yaguajay y Sancti Spíritus donde se pretende avanzar en la adaptación de locales y la terminación de un edificio de 20 apartamentos en el territorio norteño.

El mayor impacto, precisó, estará dirigido a solucionar 65 afectaciones de eventos meteorológicos, 25 inmuebles para madres con más de tres hijos y dar respuesta en locales adaptados al menos a ocho familias de las incluidas en la Tarea Vida.