Sancti Spíritus beneficia especies marinas procedentes de Caibarién

La masa del cobo procedente de las capturas que realizan los pescadores especializados en esta labor en las zonas costeras de Caibarién, al norte de Las Villas, se procesa actualmente en la Industria Pesquera de Tunas de Zaza, entidad perteneciente a la Empresa Pesquera e Industrial de Sancti Spíritus (Episan).

Según declaró a Escambray Rosaida Soto Sarduy, directora general de Episan, se trata de un servicio que vienen realizando desde hace un tiempo, toda vez que la planta de beneficio de la localidad villaclareña está siendo reparada, por lo que además del cobo, en las instalaciones tuneras se procesa también la langosta de esa zona, ambas especies con destino a la exportación.

Según la propia directora, con estas prestaciones se pueden mejorar los indicadores económicos de la entidad, además de mantener activa la fuerza laboral, pues casi todos los días reciben entre dos y tres toneladas para ser procesadas.

Sancti Spíritus aprovechará el inicio del período de veda de la langosta, previsto a partir del primero de marzo, para intensificar la captura del cobo en las zonas bajas del litoral sur, donde por lo general predomina esta especie de molusco.

Soto Sarduy ratificó que para este año el Centro de Investigaciones Pesqueras aprobó una cuota a la provincia de 40 toneladas a extraer por parte de Episan, cifra inferior a la del año anterior, lo cual obedece a un estudio realizado por los expertos para constatar la presencia del caracol en el área.

Hay que destacar que tanto el cobo como la langosta se capturan a puro pulmón, siendo los buzos trinitarios los únicos del país en ejecutar la pesca de esta manera, que conlleva a realizar decenas de inmersiones durante una jornada a fin de mantener la integridad física de ambas especies.

Luego de su captura, en las propias embarcaciones, se retira la masa del caracol antes de su traslado a la industria de Tunas de Zaza, donde, finalmente se somete a un proceso de limpieza, envase su posterior congelación y luego enviar al destino previsto.

La dirigente añadió que Episan está intencionando darle un uso al caracol —el cual hasta ahora se desecha— que pudiera ser en la obtención de calcio o de otros nutrientes que fortalezcan la alimentación animal, lo mismo que ocurre con el esqueleto de la langosta. “Todas estas ideas forman parte de un proyecto que pretendemos desarrollar de conjunto con la Universidad José Martí Pérez de Sancti Spíritus”, aseguró finalmente.