Universidad espirituana de cara al 2025

Un año intenso vivió la Universidad de Sancti Spíritus José Martí Pérez  (UNISS), matizado, en primer lugar, por el reajuste del calendario docente para, a la par de la educación general en el país, organizar los procesos de una mejor manera.

Al decir del doctor en Ciencias Edelvy Bravo Amarante, rector de la institución, han sido significativos los resultados durante el 2024. Resulta meritorio lo alcanzado desde la ciencia y la innovación. “La madurez del proyecto de Fuentes Renovables de Energía como apoyo al Desarrollo Local (FRE Local), impacta en más de 22 comunidades de todo el país, con importantes soluciones energéticas. También, la creación y la puesta en funcionamiento del FabLab, un área de conceptualización, diseño y fabricación digital que ha permitido que nuestra Universidad hoy sea líder en el país”.

Los programas académicos de posgrado y las distintas carreras de la UNISS fueron sometidas al proceso de evaluación externa, donde recibieron calificaciones superiores, como es el caso del certificado de excelencia en la mayoría.

“A pesar de ser un año marcado por la compleja situación electroenergética y las adversidades climatológicas, el impacto de la universidad en la sociedad es reconocido. En el centro no han dejado de funcionar los proyectos extensionistas que tienen que ver con la formación profesional de nuestros jóvenes y su vínculo con las comunidades”, apuntó Bravo Amarante.

Recientemente, la UNISS graduó a más de 1 200 estudiantes, suceso que contó con dos momentos importantes: el primero en la sede central y el segundo en los Centros Universitarios Municipales.

A 41 años de fundada, la Universidad de Sancti Spíritus José Martí Pérez crece y se desarrolla con alianzas fundamentales con otras instituciones de la Educación Superior en el país y fuera de este, todas con apuestas en el logro de una alta calidad en los procesos formativos, con hincapié en la colaboración e intercambio de saberes.

En tal sentido, puntualizó Bravo Amarante, en el 2025 serán disímiles los desafíos. “Lo primero es consolidar el proceso docente que tenemos en la universidad y que nuestras carreras adquieran calificaciones superiores por la Junta Nacional de Acreditación, al igual que nuestros programas académicos de posgrado. Tenemos que seguir creciendo en la unidad de nuestro claustro y del claustro con los estudiantes; en la unidad de todos los trabajadores uniseños”.

De este modo, resulta imprescindible avanzar hacia la excelencia como institución, propuesta para el año 2027, así como llevar adelante la estrategia de transición digital para conquistar el sueño de una universidad moderna desde el punto de vista de la digitalización de los procesos.

“Asimismo, continuar siendo pertinentes para la sociedad espirituana y entregando los saberes, los conocimientos, para que la toma de decisiones en el territorio se haga con un Gobierno basado en ciencia”, acotó.